INSPIRADA EN SU VIDA Y SU NIÑEZ
'Verano 1993' calienta la fría noche de la Berlinale
Saber cuáles son los sentimientos o las sensaciones que tiene un niño frente a la muerte. Por qué todo cambia sin saber el porqué. Algo así quiere enseñarnos 'Verano 1993', la primera película de la directora catalana Carla Simón. No hizo falta llamar a la musas para escribir el guión, sólo tuvo que recordar su vida y sobre todo su niñez.
La cinta muestra cómo una niña pierde a sus padres enfermos de sida y empieza una vida nueva de cambios: de la ciudad al campo y de vivir con sus padres a adaptarse, con éxito pese a todo, a vivir con sus primos y tíos. Porque al final ellos, los más pequeños, siempre han sabido aceptar la vida mejor que los mayores.
Esta semana, este verano de Carla Simón ha calentado la fría noche berlinesa. Su paso por el Festival de Cine se ha convertido en un viaje triunfal consiguiendo dos premios: Mejor Opera Prima y Gran premio del Jurado en la sección Generación KPlus.
Y esto no termina aquí también irá al Festival de Málaga compitiendo en la sección oficial. Todo un éxito para una directora nobel.
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