Kike García da un punto al Eibar ante el Athletic en el posible adiós de Laporte

El Athletic y el Eibar firmaron este viernes un empate a un gol en San Mamés que impulsa deportiva y anímicamente más al equipo armero que al rojiblanco porque los de José Luis Mendilibar mandaron durante casi todo el partido y acabaron asediando sin tregua el área de Iago Herrerín. El Eibar, además, fue capaz de sobreponerse a que el Athletic se adelantase en el marcador. Lo hizo Aritz Aduriz, de cabeza en el minuto 50, tras una gran jugada de Iñaki Williams y empató Kike García, en el 73, al recoger un rechace a un disparo de Charles y batir por alto a Herrerín.

Con la confirmación de la ausencia de Laporte en el equipo local, a la espera de su fichaje por el Manchester City, el partido lo comenzó mejor el Eibar. Que para el minuto 3 ya dio el primer aviso con un intento de vaselina desde lejos de Orellana con el que intentó sorprender a Herrerín. El balón se marchó fuera.

Fue ese dominio inicial visitante una constante en la primera mitad ante un conjunto bilbaíno incapaz de generar apenas juego. Los de Ziganda fueron las que tuvieron las mejores ocasiones antes del descanso, aunque Williams no fue capaz de aprovechar dos graves errores armeros en los minutos 11 y 31. En la primera parecía que el recién renovado hasta 2025 iba a marcar a puerta vacía después de que una mala cesión de Junça superase a Dimitrovic. Pero el meta serbio rectificó aún más rápido de lo que le llegó la 'pantera' rojiblanca para despejar a córner.

Tuvo otra parecida Williams, tras otro error de Junça y Arbilla, que dejaron pasar el balón a su espalda. Dimitrovic volvió a evitar el 1-0 adelantándose al delantero local. Esa jugada puso fina a 20 minutos de dominio aplastante de los de Mendilibar, que, sin embargo, apenas si ponía aprietos a Herrerín.

El que más lo hizo fue su compañero Iturraspe, en un despeje hacia su portería que el meta mandó a córner. Fue el segundo fallo del medio centro vizcaíno, que había dejado con anterioridad un buen balón a Kike García en el que a éste le falto velocidad y decisión para encarar a Iago. Un par de cabezazos sin muchas opciones de Etxeita y Aduriz, a centros de Susaeta e Iturraspe, cerraron tres buenos minutos del Athletic tras la segunda ocasión Williams, pero hasta el final del primer tiempo volvió a mandar el Eibar.

Pareció dispuesto el Eibar a seguir en el medio campo rival en el arranque de la segunda parte, pero rápidamente tuvo que cambiar de plan porque se adelantó el Athletic en una grandísima jugada de Williams. El veloz delantero se fue de Junça después de cuatro amagos y dejó el gol hecho a Aduriz, que estaba solo en el segundo palo, con un centro picado que casi era ya gol.

Inició esa jugada Etxeita, el sustituto de Laporte, que había encadenado varias buenas acciones defensivas y abrió para Raúl, que cedió a un Williams a la carrera. Un nuevo remate de Raúl García, esta vez en el primer palo, tras una acción similar de Williams por la derecha, y otro de Susaeta, a centro desde el otro lado del propio Raúl, amenazaron con el 2-0 y una clara superioridad rojiblanca.

No se confirmaron esas impresiones porque el Athletic dio de nuevo un par de pasos hacia atrás y el Eibar volvió a mandar en el juego. Como en la primera mitad, no parecía sacar demasiado del dominio el Eibar, pero un disparo alto de Diop en el minuto 72 ya avisó de lo que vino después, que fue el empate en una jugada de Charles al borde del área, que terminó con un disparo. El lanzamiento dio en Etxeita y le quedó franco a Kike García, que superó por alto a Herrerín.

Con el partido ya en manos del conjunto armero, que abrumó al Athletic en los últimos minutos, el equipo local pudo conseguir el 2-1 en una jugada de estrategia, pero Núñez no fue capaz de embocar en la meta guipuzcoana un centro medido y lejano de Beñat a balón parado. Y también marcar el Eibar el 1-2 en dos jugadas. Primero en un centro de Inui que tocó Charles en el primer palo y remató como pudo Kike García en el segundo; y después en un duro disparo de lejos de Arbilla que lamió el palo.