LA AFE NEGOCIA EL PRIMER CONVENIO COLECTIVO
El fútbol femenino denuncia las cláusulas antiembarazo: "Los clubes comparan embarazo con dopaje"
En la Primera División femenina no hay madres... ¿por qué? Las futbolistas españolas no se quedan embarazadas por la existencia de las cláusulas antiembarazo, una práctica que atenta contra los Derechos Humanos. Las futbolistas españolas piden profesionalizar el deporte femenino para "poder volver después" del embarazo. La AFE negocia por fin el primer convenio colectivo del fútbol femenino.
En la Primera División femenina no hay madres... ¿por qué? Las futbolistas españolas no se quedan embarazadas por la existencia de las polémicas cláusulas antiembarazo: "Si se quedan embarazadas, las echan y sin indemnización", nos cuenta la abogada María José López. Sin embargo, en otros países esta situación no ocurre y sí que son madres.
Una abogada experta en asuntos deportivos y la Asociación de Mujeres para el Deporte Profesional desvelan la existencia de cláusulas que impiden a las mujeres ser madres en el deporte español. "Si se quedan embarazadas, las echan y sin indemnización", asegura la abogada María José López.
Hasta ahora resultaba curioso que en el deporte femenino en España no se dieran casos de mujeres embarazadas. Ahora, sale a la luz que en el deporte español existen cláusulas antiembarazo que privan a las mujeres de tener hijos si quieren seguir conservando su puesto en un club deportivo.María José López, abogada experta en asuntos deportivos, y Mar Mas, miembro de la Asociación de Mujeres para el Deporte Profesional, cuentan la existencia de estas cláusulas, ya sea de forma escrita o únicamente verbal: "Que la deportista se quede embarazada es un problema", afirma la abogada.
Las jugadoras piden ayuda
Las cláusulas antiembarazo han llevado a muchas deportistas a reivindicar la necesidad de profesionalizar el deporte para no temer por su profesión: "Necesitamos ayuda si queremos ser madres", lamentan. En EEUU los clubes incluso consiguen niñeras para sus jugadoras.
El temor a qué ocurrirá si se quedan embarazadas y el miedo a perder su profesión por no volver al 100% físicamente tras el embarazo, les lleva a reivindicar la necesidad de profesionalizar el deporte.
En Estados Unidos esta situación es totalmente diferente y las deportistas pueden tener hijas sin ningún problema. Los equipos incluso les consiguen niñeras en caso de no disponer de ellas.