LALIGA JORNADA 30 | EIBAR 2-1 RAYO VALLECANO
El Eibar remonta y hunde al Rayo de Paco Jémez
El Rayo Vallecano se adelantó en Ipurúa pero el Eibar le dio la vuelta la partido en la segunda parte con los goles de Charles y Pedro León. Al equipo de Jémez se le complica mucho la permanencia.
Un buen Rayo Vallecano se vio remontado por el Eibar en Ipurua (2-1) en una segunda parte en la que los armeros voltearon el marcador y certificaron casi de forma matemática la permanencia ante un equipo madrileño que mereció algo más en el feudo armero.
El Eibar arrancó el partido como es habitual, jugando en campo contrario y logrando colocar dos centros en el área vallecana antes de cumplirse el primer minuto de juego, y un disparo de Peña antes del minuto dos, para enfado de Jémez.
Cardona tuvo una clara ocasión poco después, pero su disparo cruzado se encontró con una buena parada de Dimitrievski, sin que los vallecanos hubiesen pasado prácticamente del centro del campo hasta el momento.
El Rayo sabía que debía despertar antes de que los armeros lograsen adelantarse en el marcador, y lo empezaron a intentar adelantando las líneas y tratando de complicar la salida del balón de los de Mendilibar, a la vez que trataban de aprovechar la defensa adelantada, todo un clásico en el esquema azulgrana.
Poco a poco, el Rayo se fue sacudiendo el impresionante dominio inicial armero, y empezó a jugar como le gusta a Paco Jémez, buscando sobre todo a Bebé por la banda derecha, aunque sin riesgo para la portería de Dmitrovic.
El choque entró en una fase de más igualdad, con ambos equipos nivelando las fuerza, lo que a buen seguro gustó más a los entrenadores, pero deslució un poco el espectáculo sobre Ipurua. Raúl de Tomás tuvo dos ocasiones consecutivas poco antes de la media hora, pero en ambos casos no encontró la portería por muy poco, y el choque se volvía de ida y vuelta, mientras comenzaba a llover con intensidad en Ipurua, para más épica del partido.
El agua se convirtió en aguanieve en el tramo final de la primera parte, y parecía que los vallecanos se amoldaba mejor a la situación climatológica, aunque Ba a punto estuvo de regalar un gol al Eibar.
Sin embargo, en la siguiente jugada, el Rayo no perdonó y anotó el primero del partido con un precioso disparo de Pozo desde fuera del área, para alegría de Jémez.
Se pasó del posible 1-0 al 0-1 en un Ipurua helado en lo físico y lo anímico, que se marchó a comer el bocadillo con menos ganas de las que le hubiera gustado.
Mendilibar no quiso esperar ni un minuto más, en vista de que mucho de los visto en la primera parte no le había gustado nada. Por eso, Jordán y Pedro León arrancaron la segunda parte sobre el césped de Ipurua, para tratar de buscar la remontada.
Pese a que el Eibar quería embotellar a los vallecanos, los de Jémez optaron por defenderse lejos de su área, lo que hacía que se acumulase gente en el centro del campo, y que el tiempo pasase sin demasiadas novedades, lo que favorecía a los visitantes.
Charles tuvo el empate en sus botas tras una buena jugada de Orellana por la izquierda, pero Dimitrievski volvió a estar providencial una vez más.
El Eibar quería pero no podía, si bien es cierto que poco a poco iban logrando meter atrás a un Rayo que no quería perder el más que valioso botín que tenía hasta ese momento en el bolsillo.
Pero ya se sabe que los partidos en Ipurua se hacen largos para los rivales, y Charles cabeceó a la red un pase de Cardona para poner la igualada en el marcador y devolver la esperanza de lograr la victoria y casi otorgar la permanencia a los suyos.
Mendilibar tuvo que hacer su último cambio de forma obligada, dando entrada a Escalante por un lesionado Diop, aunque a buen seguro que no era la idea principal del míster de Zaldibar.
Aun así, Pedro León anotó el segundo para los armeros a falta de poco más de 15 minutos, un tanto que parecía poder hundir del todo a un Rayo que para nada estaba realizando un mal partido, pero cuya situación y necesidad le pesaban demasiado en las piernas.
El Rayo necesitaba echar el resto para rescatar al menos un punto que le mantuviese con vida en la pelea por la permanencia, pero el Eibar no estaba por la labor de dejarse sorprender otra vez.
Jémez puso a todo su arsenal ofensivo en el tapete, y Embarba tuvo una falta cerca del área en el descuento, aunque su disparo golpeó en la barrera armera. Incluso Dimitrievski subió a rematar un córner arriesgando mucho, pero los vallecanos no lograron la machada y los tres puntos se quedaron en casa.