El Manchester City se gusta en el Emirates y golea al Arsenal en media hora

El Manchester City amplió su diferencia en lo más alto de la Premier League hasta los 16 puntos después de golear este jueves en Londres al Arsenal por 0-3, el mismo resultado con el que se impuso hace cuatro días en la final de la Copa de la Liga.

Los pupilos de Pep Guardiola, con su victoria en la EFL Cup todavía reciente -ganaron a los 'Gunners' el domingo en Wembley-, se pasearon esta noche en el feudo de su rival y, gracias a los goles de Bernardo Silva (m.15), David Silva (m.28) y Leroy Sané (m.33), dieron un paso de gigante hacia el título e infligieron todavía más dolor en el ya de por sí cuestionado Arsene Wenger.

Las adversas condiciones climáticas -temperatura de menos 1 grados centígrados y nieve- y las malas conexiones con trenes y metro, víctimas de la 'Tormenta Emma', desalentaron a los aficionados de los londinenses, que optaron por no ver en vivo el enésimo ridículo de su equipo y dejaron el Emirates con un desolador panorama de un tercio de entrada.

Muy pronto inauguraron los 'Citizens' el marcador, apenas 15 minutos tardaron, cuando el portugués Bernardo Silva se sacó un zurdazo dulce desde la frontal que se fue cerrando y alojó la redonda en la meta de Cech. El tanto no desanimó del todo a los aficionados, aunque sí trajo consigo los primeros abucheos de la grada, hastiada con el pobre rendimiento de su equipo y el poco hambre competitivo de los suyos.

No reaccionaron los 'Gunners' y el City picó de nuevo, esta vez en el minuto 28, cuando otro Silva, esta vez el español David, recibió un gran pase en el área de Agüero tras un buen uno-dos con De Bruyne, superó fácil a Bellerín y definió con la zurda ante la salida de Cech.

Sin tiempo para la reacción, los de Guardiola mataron definitivamente el duelo cinco minutos más tarde gracias a Sané, que superó fácil al guardameta desde el área pequeña tras un buen pase de Agüero, que no marcó hoy pero se apuntó dos asistencias.

Ya en la segunda mitad, y con las gradas del Emirates mostrando un aspecto paupérrimo, más propio de un amistoso que de un duelo de Premier League, los de Wenger tuvieron una ocasión inmejorable de recortar diferencias, pero Aubameyang falló -atajó Ederson- un penalti cometido por Otamendi sobre Mkhitaryan.

Con el partido sentenciado, ambos equipos dejaron correr los minutos, en una fría segunda parte que sólo animaron los aficionados del City con sus cánticos de 'Blue Moon', el himno oficioso del club, y tonos jocosos pidiendo a Wenger que por favor no se fuera y siguiera en el Arsenal.

Estos tres puntos dejan al equipo de Guardiola todavía más líder de la liga inglesa, con 16 puntos de ventaja sobre su más inmediato perseguidor, el Manchester United, y a un paso del título a falta de 10 jornadas, mientras que los 'Gunners' se mantienen sextos, con 45 puntos, a 10 de los puestos que dan acceso a la próxima edición de la Liga de Campeones.