Rayo 1-1 Real Madrid
El Real Madrid se estanca ante un aguerrido Rayo Vallecano
Los de Carlo Ancelotti no cuajaron una buena actuación en Vallecas y solo pudieron rascar un punto donde los goles los pusieron Joselu y Raúl de Tomás.
Falló el Real Madrid en Vallecas. Un inicio fulgurante de los madridistas fue insuficiente ante un aguerrido Rayo Vallecano, que provocó el estancamiento en ataque de los de Carlo Ancelotti para sacar un empate (1-1).
Ancelotti sorprendió en el once, dejando en el banquillo a Rodrygo, Kroos o Carvajal y apostando por Modric, Fran García o Joselu. Y el inicio de partido pareció darle la razón al italiano.
El Real Madrid comenzó el encuentro de una forma trepidante. Fede Valverde envió un centro lateral para que Joselu rematase ante la salida de Dmitrievski. En un principio se anuló por fuera de juego, pero el VAR intervino para dar validez al delantero madridista a los tres minutos de partido.
Sin embargo, ese inicio fue un espejismo para los blancos. El Rayo Vallecano no se intimidó y empezó a acercarse con peligro a la portería de Lunin. Poco más tuvo que esperar el Rayo para obtener su premio. Y lo hizo a la media hora de encuentro a través de un penalti. Un disparo de Trejo golpeó en la mano de Camavinga, que la tenía alejada del cuerpo. Volvió a tener que intervenir el VAR para señalarlo.
Y en la pena máxima, Raúl de Tomás no falló. Ahí volvió a reaccionar el conjunto de Carlo Ancelotti, cuya ocasión más clara fue de Fede Valverde con un disparo desde fuera del área que golpeó en el poste.
En la segunda parte, el Rayo comenzó avisando con un fallo de Tchouameni. El francés perdió el esférico ante Álvaro García, aunque pudo reaccionar a tiempo para taponar el disparo. Y desde ese momento, el juego comenzó a trabarse. Movió el árbol Ancelotti con varios cambios, pero solo un disparo de Kroos que sacó Dmitrievski fue una acción reseñable del ataque madridista.
Para colmo, acabaron con 10. Carvajal, que había entrado en la segunda parte, fue expulsado por dos amarillas en dos minutos. La primera, por protestar y, la segunda, por soltar el brazo y golpear a Kike Pérez. Y con esa acción, se acabó el encuentro con empate final en un encuentro poco fluido de los de Ancelotti.
No obstante, este empate no impide al Real Madrid continuar como líder de LaLiga, con seis puntos de ventaja sobre el Girona con un partido más disputado.