El Sevilla ahoga y gana al Atlético para presentar su candidatura a la Liga

El Sevilla ha dicho 'no' a una Liga de tres. El Sevilla ha dicho que quiere unirse a la fiesta, que quiere ser parte del baile y que quiere además llevarse a la más guapa. Que quiere la Liga. Y lo ha hecho como debe de hacerse, ganando a uno de los candidatos y favoritos, derrotando por 1-0 a un Atlético al que venció en intensidad y en esfuerzo en el segundo acto. Partido casi perfecto para los de Sampaoli para seguir contando por victorias todos sus partidos en el Pizjuán y para infringir la primera derrota del curso a los de Simeone.

Y para poner desde ya su nombre entre los candidatos para llegar a la jornada 38 con opciones a título. Porque vencieron y convencieron, y porque se dejaron el alma y la piel ante uno de los más grandes de Europa. Tuvo las suyas el Atlético eso sí, sobre todo en una primera parte en la que entraron más despiertos que los hispalenses al duelo. Gameiro estuvo cerca, Correa estuvo aún más cerca, pero conforme pasaban los minutos se vio que la lluvia que caía en Sevilla iba dando más y más fuerza a los andaluces. El resultado fue un duelo de titanes.

Uno en lo que ni uno ni otro dio su brazo a torcer. Uno en el que dos de los grandes, de los mejores y más en forma, se midieron de tú a tú sin dar absolutamente nada por perdido. Cada balón era una batalla, y cada batalla caía en un lado o en otro dependiendo de quien creyera más en sus opciones. De quien creyera más en su juego y en su idea. El Sevilla, el de Sampaoli, tenía más fe que un equipo que de nuevo salió con Carrasco, Correa, Griezmann y Gameiro y que se estrelló con el 'muro' de tres del técnico argentino.

Estaban mejor sobre el césped los sevillistas, y en la segunda parte nada cambió. Nada cambió para mal, pero para bien suyo sí. Primero fue un tiro al palo. Luego un paradón de Oblak, y más tarde el gol. A la tercera fue la vencida, y a la tercera N'Zonzi hizo valer su zancada y el perfecto pase de Vietto para batir con un sutir toque de diestra al esloveno. Uno a cero, y los problemas para el Atleti que aún apenas comenzaron.

Lejos de aspirar a la remontada, los del Cholo se quedaron con diez. Koke vio la doble amarilla en apenas diez minutos, 'víctima' de la 'guerra' sin cuartel que tuvieron en el Pizjuán el Sevilla y el Atleti. No notaron la superioridad numérica los de Sampaoli, siguieron jugando igual. Ahogando a los de Simeone, con una presión en todas las zonas del campo. Sin dejar pensar a ningún jugador que vistiese de negro y amarillo. El arreón final, con una ocasión de Godín tras conectar un cabezazo al que apenas pudo dar fuerza.

Con Griezmann desaparecido, Vietto esperó la suya en alguna contra para dar la puntilla a los que en el pasado curso fueron sus compañeros. No fue necesario. No hizo falta. El solitario gol de N'Zonzi fue bastante para batir a los rojiblancos, y la idea de Sampaoli borró y ahogó al Atlético en el Pizjuán. La Liga es larga, pero el Sevilla ha hecho un 'aquí estoy yo'. La ilusión se deja sentir en el Pizjuán.