La crisis llega a las neveras de los españoles

La regla de tres no falla. Cobramos menos y pagamos más impuestos, así que la bolsa de la compra sale del mercado cada vez más vacía. "Como, pero lo esencial, de otra forma", explica una señora. No es el caso sólo de las amas de casa, un joven explica en que reduce: "Compro menos carne, menos vino y aceite".

En nuestra despensa hay menos de casi todo. Sobre todo de los productos más caros: la venta del aceite de oliva, por ejemplo, ha caído un 15%, mientras que el aceite de girasol seguimos comprándolo al mismo ritmo.  "Yo no sé si la gente se ha puesto a dieta pero pero el aceite se vende menos, bastante", revela una dependienta. Y en la carnicería, ¿cómo se ahorra?: "Se venden menos carnes caras, la gente se va más al cerdo. En la carne picada antes se mezclaba y ahora se utiliza solo la de cerdo"

Compramos menos ternera, menos marisco y menos bebida. Pero también han caído las ventas del pescado, el fresco y el congelado, y de la leche y sus derivados."Se vende menos de todo, si antes se llevaban dos kilos ahora se llevan medio", explica una frutera.

Para los expertos esta es la señal definitiva y más peligrosa de la incidencia de la crisis en la economía doméstica. Antes nos quedábamos sin vacaciones o sin cambiar de coche. Ahora directamente, compramos menos comida. "Puede empezar a haber problemas en términos de enfermedades sociales, en los niños, la juventud y los adultos", analiza Marcos Roitman, sociólogo UCM.

Hay otra señal inconfundible. Los españoles ganan de media poco más de 22.500 euros al año, un 0,3% menos que en 2011. La primera caída en la historia de nuestro sueldo medio declarado en el IRPF. Tan duro como real comemos menos porque somos más pobres.