Crisis energética
Los expertos ven "desmoralizador" volver al carbón porque hay crisis de "modelo energético" y no de suministro
Los expertos lamentan que el carbón "es la forma más sucia de producir energía eléctrica" y además advierten de la necesidad de "un abandono completo de los combustibles fósiles para evitar los mayores efectos de la crisis climática”.
Son varios los países europeos que en pleno proceso de transición ecológica dudan sobre dar marcha atrás en el desmantelamiento de sus centrales de carbón para asegurar el suministro y paliar la escalada de precios.
Según la oficina de estadística comunitaria Eurostat, Rusia fue el principal proveedor de derivados del petróleo y gas natural de la Unión Europea en 2021, una realidad que ha empujado a Estados como Alemania, con una fuerte dependencia de estos productos, a explorar alternativas no verdes en pleno proceso de transición ecológica.
La Unión Europea sancionó a Polonia a finales de 2021 con un millón de euros diarios por no paralizar su actividad en la mina de carbón de Turow. Pero ahora se plantea prolongar la vida de sus centrales térmicas, algo que el experto en Políticas Energéticas de JGB, Javier García Breva, ha calificado como "contradictorio y desmoralizador porque está afrontando esta crisis como una crisis de suministro, cuando en realidad es una crisis de modelo energético basado en la dependencia energética de la importación de combustibles fósiles”.
Otro ejemplo es el de Austria, que en 2020 se deshizo del carbón, pero ahora se prepara para reabrir la térmica de Mellach. Francia, Alemania, Italia y Países Bajos también han anunciado que recurrirán al carbón si hace falta. Acerca de este asunto el responsable de Campaña contra los Combustibles Fósiles de Greenpeace España, Francisco del Pozo, ha dicho a laSexta que el carbón "es la forma más sucia de producir energía eléctrica. Necesitamos un abandono completo de los combustibles fósiles para evitar los mayores efectos de la crisis climática”.
Expertos plantean otras alternativas
Expertos y organizaciones medioambientales plantean otras alternativas, como ha señalado Del Pozo, quien ha opinado que “las medidas a adoptar han de ser valientes y van en tres patas: ahorro, eficiencia y renovables”. Algo que va en la línea del pensamiento de Breva, quien señala que la alternativa "pasa por invertir más en energías limpias. La UE tiene un catálogo enorme de medidas de eficiencia energética que no se están cumpliendo”. Puedes obtener más información sobre este asunto en el vídeo que acompaña a estas líneas.
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