POLÉMICA POR EL CUPO VASCO
Montoro defiende introducir el nuevo modelo de financiación autonómica en los Presupuestos de 2018
El País Vasco va a conseguir lo que muchas autonomías llevan tiempo pidiendo: mejorar su financiación. El nuevo cupo vasco ha despertado la demanda de las autonomías gobernadas por el PSOE de un nuevo modelo de financiación autonómica. Montoro vincula este cambio a la aprobación de los presupuestos de 2018.
Montoro busca apoyos para aprobar los próximos Presupuestos que van con retraso, y ha encontrado en la reforma del modelo autonómico una manera de recabarlos. "Lo ideal es que los Presupuestos de 2018 tengan el nuevo modelo de financiación autonómico", afirma el ministro.
Búsqueda de apoyos y de paso respuesta a las últimas críticas de los socialistas, que catalogan los actos de Montoro como "una tomadura de pelo, porque si es urgente no se entiende por qué no lo sacan".
El melón de la financiación se ha reabierto tras saberse que el PSOE dará su apoyo a Rajoy para aprobar el nuevo cupo vasco, que rebaja la cantidad que Euskadi entrega a la Hacienda española tras recaudar todos los impuestos y que según el presidente asturiano hace que sea una autonomía sobrefinanciada.
Al malestar de Asturias también se une Andalucía o Valencia, que pedían que antes de dar apoyo al cupo, Ferraz presionara al Gobierno para acelerar el nuevo modelo. Mientras, Pedro Sánchez ha telefoneado a los presidentes socialistas para explicarles que la dirección comparte sus reclamos.
Ciudadanos, en cambio votará en contra del cupo porque lo ve "injusto" para el resto de comunidades. Desde el País Vasco responden que aportan con el cupo más de lo que les corresponderían.