LA JUSTICIA, TRAS EL ESCÁNDALO
Todos los gastos pagados con las tarjetas black superan los 15 millones de euros
Viajes de verano, comidas en restaurantes de lujo y trajes hechos a medida son algunas de las cosas para las que utilizaron sus tarjetas opacas los directivos y consejeros de Caja Madrid. La Fiscalía Anticorrupción pide para los acusados por el uso fraudulento de las back penas de varios años de prisión. Para Rodrigo Rato, cuatro y seis para Miguel Blesa.
José Antonio Moral Santín, exvicepresidente de Caja Madrid entre 2003 y 2011 cargó 456.000 euros en su tarjeta. La mayor parte de ese dinero fueron retiradas de efectivo que hacía una vez a la semana. El fiscal pide para él cuatro años de prisión.
Es la misma pena que solicita para Gerardo Díaz Ferrán, que gastó 93.000 euros a cargo de la entidad. La mayoría en restaurantes, algunos de cuatro o cinco tenedores. También en restaurantes, pero de su propiedad, usó su tarjeta black el que fuera presidente de los empresarios madrileños. Arturo Fernández gastó 38.000 euros.
La suma de la tarjeta del exsecretario general de comisiones obreras en Madrid, Rodolfo Benito, es mucho mayor, 140.000 euros con los que pagó trajes a medida, calzados y gasolina. En maletas se dejó 1.200 euros
El gasto del líder de UGT en Madrid fue de 44.000 euros. En la Nochebuena de 2010 pagó 3.000 en unos grandes almacenes. Rafael Spottorno, exjefe de la casa del rey usó su tarjeta para pagar desde las cuotas del gimnasio hasta ropa de lujo y artículos de ferretería. 235.000 euros por los que la fiscalía pide dos años de prisión. La suma de los gastos de todos los implicados supera los 15 millones de euros.