LOS VECINOS, MUY PENDIENTES DE LAS LLAMAS

Cientos de efectivos terrestres y decenas de medios aéreos siguen trabajando en el incendio de La Palma

El último balance del incendio en la isla canaria de La Palma es de más de 4.000 hectáreas quemadas y 2.500 vecinos fuera de sus casas. Un total de tres focos siguen activos, aunque el que más preocupa es el de la cumbre en la villa de Mazo que no está controlado. Diez medios aéreos y 350 efectivos siguen luchando contra el fuego.

La Palma continúa ardiendo y ya son 4.000 las hectáreas quemadas. Los miembros de emergencia trabajan a destajo, en la zona se encuentran más de 350 efectivos terrestres y 11 medios aéreos.

El fuego se originó en Jedey y fue avanzando hacia el municipio de El Paso que permanece perimetrado.

El incendio llegó a tocar los Llanos de Aridane y se fue extendiendo hacia Fuencaliente. Aquí se prevé que puedan llegar a perimetrarlo muy pronto.

Las llamas han avanzado hacia el este y preocupa, sobre todo, el foco de la pista del Cabrito, en la cumbre de Villa de Mazo.

Allí, no ha llegado al núcleo urbano, así que el número de evacuados permanece igual: 2.500 personas han tenido que abandonar sus casas y los vecinos de Montes de Luna están prevenidos por si hiciera falta desalojar.

La desesperación de los habitantes del sur de la isla es evidente.

"Había dos posibilidades: o bien defender la vivienda o defender la integridad física y consideramos que era más importante la segunda", declaraba uno de los vecinos.

"Decidí quedarme, sobre todo, para mojar los alrededores de la casa. Antes de verme apurado, me voy, pero de momento, tengo un perímetro para poder trabajar", añadía otro de los afectados.

La extinción del incendio dependerá en gran medida de las condiciones meteorológicas.

Mientras los vecinos contemplan atónitos el incendio que va devorando poco a poco la ‘Isla Bonita’.

LaSexta / Noticias