En su trayecto a Belo Horizonte
Brasil denuncia el trato de las autoridades de EEUU por el uso de esposas contra los deportados por Trump
Indignación A través de un comunicado, el gobierno brasileño ha informado que pidieron a los agentes norteamericanos que retirasen de forma "inmediata" los grilletes que llevaban sus ciudadanos.
Brasil ha denunciado el trato de las autoridades de EEUU contra las decenas de personas que Donald Trump ha deportado en un avión de regreso al país sudamericano. En un comunicado, el gobierno brasileño, ha afirmado que los ciudadanos llevaban puestas esposas en el vuelo de vuelta.
En ese sentido, Ricardo Lewandowski, ministro de Justicia y Seguridad Pública, ordenó a la Policía Federal que pidiera a los agentes norteamericanos que retirasen de forma "inmediata" dichas esposas, en cuanto el avión realizó una parada técnica en la ciudad de Manaos.
Además, en dicha parada, los 88 deportados se alojaron en un área del aeropuerto, donde recibieron comida, colchones y tuvieron acceso a las duchas.
"El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública enfatiza que la dignidad de la persona es un principio básico de la Constitución Federal, y uno de los pilares del Estado democrático de derecho", expone el comunicado.
Lula habla de "falta de respeto flagrante"
Lewandowski, por su parte, ha informado que Lula, presidente de Brasil, ha tachado el uso de esposas como una "falta de respeto flagrante de los derechos fundamentales" de los ciudadanos deportados.
Lula, además, ordenó que una aeronave de las Fuerzas Armadas transportase a los deportados desde Manaus hasta Belo Horizonte, su destino final, para que pudieran completar el viaje con "seguridad y dignidad".
Es el primer vuelo de deportación a Brasil desde que Trump tomase posesión de su cargo como presidente de Estados Unidos, aunque el viaje ya estaba programado antes de que diese comienzo su mandato, según explicaron a EFE fuentes de la Cancillería.
Trump, en su segundo mandato, ha firmado ya una serie de decretos para frenar la migración irregular a EEUU. Entre sus medidas, la declaración de la emergencia nacional en la frontera con México, donde está incluso la Marina estadounidense, y movilizar agentes para reforzar las deportaciones de millones de migrantes.
500 deportaciones en cinco días
El republicano ha hecho de la migración uno de los temas principales de su política, al igual que hizo durante la campaña, en estos primeros días en la Casa Blanca. En apenas días, la nueva administración de EEUU ha presumido incluso de que en menos de una semana han deportado ya a 500 personas.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, ha asegurado que la migración es la "prioridad número uno" y que Trump, por fin, se está encargando de ella. Con este objetivo, han permitido que el Ejército estadounidense persiga a los migrantes, también en colegios, iglesias y centros hospitalarios, y los que cruzaron recientemente la frontera se encuentran bajo custodia de la Patrulla Fronteriza.