EN EL MERCADO DE XINFADI

China identifica el genoma del coronavirus causante del rebrote de Pekín: "El virus es de Europa"

China ya ha informado a la OMS de que la cepa del virus causante del rebrote de Pekín: es europea. Aun así, el responsable del Centro Chino para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) ha informado de que no tiene por qué proceder de Europa ya que no es la que actualmente se está extendiendo allí. También ha advertido de que el mercado de Xinfadi permitió la conservación del virus por sus bajas temperaturas y su alta humedad.

China ha hecho pública la secuencia genómica de las trazas de coronavirus halladas en el mercado donde se originó el reciente brote de Pekín. Los investigadores chinos ya advirtieron el viernes de que habían identificado una cepa europea en el SARS-COV2 en los estudios preliminares, sin embargo, ahora especifican: "Según los resultados preliminares del estudio genómico y epidemiológico, el virus es de Europa, pero es diferente del virus que se está propagando actualmente en Europa", ha explicado Zhang Yong, funcionario del Centro Chino para el Control y Prevención de Enfermedades, que ha asegurado que esta cepa es más antigua.

Zhang afirmó que había varias posibilidades de que la cepa hubiera viajado hasta China: "Podría haber estado oculto en productos alimenticios congelados importados, o haber estado al acecho en un ambiente húmedo como Xinfadi si previamente no había sido desinfectado o esterilizado". Así afirmó Zhang las posibles explicaciones a que la cepa sea "europea", pero no actual, en un artículo publicado por la Comisión Central de Inspección de Disciplina.

Wu Zunyou, el principal experto en epidemiología de los CDC, había afirmado a los medios estatales a principios de esta semana que la cepa de Pekín era similar a la de Europa, aunque no necesariamente procedía directamente desde los países europeos. Wu no dio más detalles sobre los comentarios realizados antes del lanzamiento de la secuencia del genoma, aunque añadió que las cepas de coronavirus encontradas en Estados Unidos y Rusia eran también europeas.

China, que había estado bajo presión para hacer públicos los datos cuanto antes sobre la cepa que había causado los casos de COVID-19 en la capital del país, aseguró que también había enviado los datos a la Organización Mundial de la Salud.

Según lo publicado en la página web del Centro Nacional de Datos de Microbiología de China, los datos del genoma se basaron en tres muestras, dos humanas y una ambiental, recolectadas el 11 de junio.

Ese fue el mismo día que Pekín reportó su primera nueva infección local COVID-19 en meses. En los ocho días transcurridos desde entonces, la ciudad ha reportado un total de 183 casos, relacionados con el extenso centro de alimentos al por mayor de Xinfadi, en el suroeste de la ciudad.

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