Al menos cinco muertos y 200 heridos
Dolor entre incógnitas en Alemania tras el atropello múltiple en el mercado navideño de Magdeburgo
Las dudas Las autoridades, en un país de luto tras el letal ataque, siguen investigando las motivaciones del autor del atropello masivo en la ciudad del este alemán.
Alemania sigue sumida en el duelo. Sigue de luto, después del ataque en la ciudad de Magdeburgo, en el este del país, en el que un vehículo, presuntamente conducido por un médico saudíque ya ha sido detenido, arrolló mortalmente con su coche a cinco personas e hirió a 200, dejando a 41 de ellas graves. De fondo, muchos interrogantes todavía sin resolver.
De "horrible" y "brutal", ha calificado Olaf Scholz, canciller alemán, el ataque contra este mercadillo. Ha sido en su visita a la ciudad, en unas palabras en las que ha confirmado que "todo el país está de luto con Magdeburgo" en una intervención en la que junto a él estaba Reiner Haseloff, primer ministro de Sajonia-Anhalt, el estado federado donde se encuentra la ciudad atacada.
Los dos han prometido hacer lo necesario para investigar lo ocurrido. Para aplicar todo el peso de la ley al responsable en el transcurso de una jornada en la que las flores en honor a las víctimas coparon varios puntos de la localidad y la catedral de la ciudad ha organizado un acto religioso en favor de la "unidad" de los ciudadanos en "tiempos difíciles", según los términos del Ayuntamiento.
Un motivo aún por aclarar
En esta situación, Scholz ha tratado de dar explicación a algunas cuestiones que rodean al ataque: "Tenemos que entender al delincuente, sus acciones y sus motivos con precisión para luego responder con derecho penal y otras consecuencias necesarias. Y lo haremos", ha prometido.
El presunto responsable del ataque fue detenido poco después del atropello múltiple que desoló el mercado navideño. Según el perfil que han trazado de él los medios de comunicación alemanes, se trata de un psiquiatra identificado como "Taleb A.", un hombre de origen saudí que se había definido a sí mismo en una entrevista en el diario 'Frankfurter Allgemeine Zeitung' en 2019 como el "más agresivo de los críticos del islam de la historia".
En redes sociales también había manifestado simpatía por el partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) y lanzado críticas contra la excanciller Angela Merkel, a quien acusó de tener un plan para islamizar Europa. Las autoridades responsables de la investigación en Magdeburgo, sin embargo, han eludido entrar en detalles sobre la motivación del ataque.
La Fiscalía se ha referido ya como "atentado" al suceso, según el término empleado por Horst Nopens, fiscal de la ciudad alemana: "Hablamos de un atentado. Si ha sido un atentado terrorista es algo que no sabemos todavía", señalaba no obstante.
"Debemos valorar ahora los dispositivos de almacenamiento de datos, ordenadores, móviles... Así, al final, sabremos o esperamos saber qué es lo que le movió", ha afirmado el fiscal en una rueda de prensa en la que estaban también Tom Oliver Langhans, director de la Comisaría de Policía de Magdeburgo, y Ronni Krug, responsable del Ayuntamiento de la ciudad.
¿Cómo pudo entrar el vehículo en la zona?
Porque hay muchas dudas. Una, mismamente, es cómo pudo el vehículo entrar en el espacio del mercado navideño cuando estas instalaciones suelen disponer de medidas de seguridad en Alemania desde que, en 2016, un camión embistiera un mercadillo de Berlín en un atentado reivindicado por el Estado Islámico.
Según Krug, las autoridades no podían contar con lo ocurrido, puesto que habían organizado un sistema de seguridad valorado por las instituciones policiales y de orden público de la ciudad. Tras este ataque, varios mercadillos como los situados en Leipzig, Halle o Berlín han aumentado las medidas de seguridad. El del centro de Magdeburgo, sin embargo, permanecerá cerrado durante todas las fiestas y mientras que la investigación prosiga seguirá acordonado.
La ultraderecha busca sacar rédito del ataque
El atropello llega, además, en un momento más que delicado para Alemania. El país está en vísperas de una campaña electoral, con un Scholz más débil que nunca... y la ultraderecha tiene claro que si hay que sacar tajada de todo esto, lo va a hacer. De hecho, ya lo está haciendo.
Es lo que se traduce de las palabras de Viktor Orbán, primer ministro de Hungría. En sus declaraciones, no ha dudado en señalar a la inmigración: "Especialmente la ilegal, y los ataques terroristas. Hay quienes todavía intentan negar estas conexiones", ha esgrimido. En una línea similar se ha posicionado Giorgia Meloni, primera ministra de Italia: "Debemos cuidar la forma en que gestionamos nuestras políticas, incluso el cómo garantizamos la seguridad de nuestros ciudadanos".
No solo los políticos han hablado, también multimillonarios como Elon Musk. El magnate, uno de los grandes adalides de la campaña que ha llevado a Donald Trump a la Casa Blanca, considera que un fallo de seguridad como este solo puede solucionarlo la ultraderecha.