Dos niños refugiados con cáncer terminal esperan que el Gobierno autorice "urgentemente" su traslado a España

Mudafar y Ahmed tienen diez y ocho años. Viven junto a su familia en el campo de refugiados de Katsika, en Grecia y los dos padecen Esplenomegalia, un tipo de cáncer que afecta al hígado. Si esta enfermedad avanza hasta la última fase ya no habrá vuelta atrás.

"Todos los médicos dicen que no habrá cura para nuestros hijos y morirán si no acceden a los tratamientos que necesitan urgentemente", lamentan sus padres, Mohamed y Midia.

El tiempo corre en su contra y necesitan de forma inminente un visado que les autorice venir a España para recibir el tratamiento y el posible trasplante que les permita sobrevivir."Necesitan una dieta especial y urgentemente que los Gobiernos den los papeles necesarios para que sean trasladados a España", destaca Diego Velasco, bombero de la ONG Aire.

La ONG Aire junto a otros voluntarios ya se ha encargado de conseguir el dinero suficiente para el viaje y la estancia de la familia en nuestro país. Ahora buscan sin descanso el hospital más apropiado para tratarles mientras su familia espera impaciente la buena noticia.

"Yo espero recibir pronto auxilio en algún país europeo, me siento muy mal por no poder ayudar a mis hijos", explica su padre. Sobre el terreno, dos bomberos de la ONG se hacen cargo de ellos y les suministran medicamentos para paliar los dolores que sufren los pequeños.