QUIEREN RECUPERAR LA CAPITAL DE LA PROVINCIA

EEUU bombardea las posiciones de los talibanes en la provincia afgana de Kunduz

La Fuerza Aérea estadounidense ha lanzado un ataque aéreo sobrelas posiciones de los talibanes en la provincia afgana de Kunduz. Así, las fuerzas de seguridad intentan recuperar el control de la capital de la provincia que ha sido tomada por los insurgentes, en su mayor éxito militar desde que fueron sacados del poder en 2001. Las tropas afganas ya habían recuperado instalaciones policiales y trataban de recuperar el control de la prisión y otras zonas de la ciudad.

La Fuerza Aérea estadounidense ha lanzado un ataque aéreo sobre posiciones de los talibanes en la provincia afgana de Kunduz, mientras las fuerzas de seguridad llevan a cabo una operación para recuperar la capital de la provincia, tomada por los insurgentes, según indicaron fuentes oficiales.

"Las tropas estadounidenses lanzaron un ataque aéreo para eliminar la amenaza contra la coalición y las fuerzas afganas en el área", indicó el portavoz de las tropas estadounidenses en Afganistán, coronel Brian Tribus.

Agregó que las tropas de la OTAN continúan en tareas de entrenamiento y asistencia a la defensa nacional afgana y las fuerzas de seguridad de acuerdo con los términos de la misión Apoyo Decidido.

Las fuerzas de seguridad afganas lanzaron una operación militar para recuperar el control de Kunduz, que fue tomada en el mayor éxito militar de los talibanes desde que fueron sacados del poder en 2001.

Las tropas afganas ya habían recuperado instalaciones policiales y trataban de recuperar el control de la prisión y otras zonas de la ciudad.

El presidente de Afganistán, Ashraf Gani, cumple un año en el poder con una creciente situación de pérdida de seguridad y ralentización económica, que coincide con la salida de las tropas extranjeras del país.

La OTAN mantiene unos 4.000 militares en Afganistán en el marco de Apoyo Decidido, mientras que Estados Unidos lleva a cabo una operación de combate o antiterrorista que incluye 9.800 militares que permanecerán en principio hasta final de año después de que el presidente estadounidense, Barack Obama, decidiese ralentizar su salida del país.

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