Testimonio
"En medio del conflicto armado hay gente vulnerable": la dura realidad de vivir en Sira
Cuando se cumplen diez años de la guerra en Siria, laSexta pone el foco en la situación que vive el país.
El abogado ecuatoriano Pablo Vizcaíno, oficial de protección de ACNUR, lleva 18 años siendo trabajador humanitario, ha estado en operaciones de desplazamiento y refugio en Yemen, Sudán del Sur, Líbano, Zambia y Siria.
Cuando se cumple una década de la guerra en Siria, laSexta habla con él para que nos relate cómo ha vivido el conflicto y la barbarie al lado de los que más sufren.
"En medio del conflicto armado hay gente vulnerable y es a ellos a quienes más hay que ayudar", explica. Sin embargo, en este tipo de situaciones el margen de maniobra es más que limitado. "No puedes atender a todos y eso probablemente es una de las frustraciones más grandes; planteas hacer planes de contingencia, ver cuánta gente vas a apoyar y no lo puedes hacer. En una zona, por ejemplo, hay 40.000 personas en situación de necesidad y probablemente solo haya dinero y capacidad de ayudar a 10.000", relata.
Parte del dinero que recibe ACNUR llega de países como España, que según explica Vizcaíno, se ha convertido en uno de los donantes más importantes a nivel privado. "Hay una conexión entre los chicos y chicas que se encargan de las donaciones en el centro de Madrid, en Gran Vía, y la ayuda humanitaria", cuenta.
Comparando la situación en países como Siria y el confinamiento, Pablo Vizcaíno destaca que no poder salir por el COVID-19 guarda similitudes "con lo que vive el humanitario".
Sobre el trabajo en el terreno, Vizcaíno explica que la ayuda humanitaria implica "riesgos personales" y recuerda que cuando nació su hija tuvo que salir de Siria y volver al poco tiempo para seguir ayudando: "Era un papá por Skype y tenía una niña de dos años que no me reconocía cuando volvía". La clave para él es buscar el equilibrio entre su vida personal y su trabajo, algo que a día de hoy sigue intentando.