Cierre de campaña
El PSOE llama al 'zurdazo' en el 9J ante una derecha hostigada por los ultras y la ola reaccionaria en Europa
A menos de 48 horas de que se abran las urnas, mientras el PSOE se muestra optimista dando por hecho que ganará las elecciones, desde el PP han ido perdiendo expectativas y hablan ya de "empate".
La campaña electoral para las elecciones europeas llega a su fin. Una carrera anómala y tensa entre candidatos, con Begoña Gómez en el centro del huracán, con varias investigaciones en curso y decisiones judiciales que están condicionando las últimas horas de la campaña del 9J.
En los últimos días apenas han hablado de otra cosa. Tanto Europa como la amnistía -tema estrella del PP- han quedado en segundo plano y ha sido la mujer del presidente, Begoña Gómez, quien ha monopolizado el discurso de los partidos. Así, se ha convertido en un arma electoral de doble filo que enarbolan tanto PP como PSOE para movilizar a su electorado este domingo.
Este mismo viernes, en el acto de final de campaña del PSOE en Fuenlabrada, los socialistas han repartido pulseras con el lema 'Free Bego' al más puro estilo 'swiftie'.
Desde que el juez Juan Carlos Peinado anunció el pasado martes que citaba a declarar a la mujer de Sánchez como investigada el próximo 5 de julio, las menciones a su mujer han protagonizado la mayoría de los mitines.
El miércoles, de hecho, Pedro Sánchez y Begoña Gómez reaparecieron juntos en un acto del PSOE en Benalmádena (Málaga).
Y es que los socialistas quieren sacar partido a lo que califican de campaña contra el Gobierno. Sin ir más lejos, el fondo de pantalla durante el mitin de Cataluña era una imagen de Sánchez y su mujer juntos.
Que los socialistas se beneficien de este tema, para el Partido Popular es algo insólito. Este viernes por la mañana, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha criticado que Sánchez lleva a su mujer " a los mítines y la aplaude, es una cosa sorprendente".
Pero, por su parte, el PP también se agarra a la investigación a Begoña Gómez para intentar ganar las elecciones del domingo. El líder popular ha ido más allá y ha asegurado que "debería ser una vergüenza para la familia". Mientras, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha insistido en que "menos fotitos a lo Kennedy y más explicaciones". Incluso los socios de Gobierno han criticado que Begoña Gómez haya monopolizado la campaña. Este viernes, la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha denunciado que "se está hablando de todo menos lo que necesita la gente".
El PP pasa de creer que va a ganar las elecciones a hablar de "empate"
Las sensaciones al final de campaña son opuestas en los dos grandes partidos. La expectativas del PP han ido menguando a lo largo de la campaña: arrancaron seguros de una gran victoria y han terminado hablando de empate. El PSOE, por su parte, empezó con pocas esperanzas y hoy se muestran convencidos de que ganarán el domingo.
El líder del PSOE ha ironizado con que la palabra más repetida por los populares sea el "empate". "Hace un mes el PP decía que iba a arrasar y hoy ya están en "vamos a empatar"", ha comentado Sánchez. Los socialistas se ven mucho más fuertes y hasta hablan de una remontada dejando al Partido Popular como el perdedor. Según ha comentado Sánchez este vienes, tiene muy "buenas vibraciones" para este 9J y ha animado a que los "zurdos" y "zurdas" vayan el domingo a las urnas.
Miedo al auge de la ultraderecha en Europa
El auge de una ultraderecha cada vez más fuerte en Europa también ha sido uno de los temas que ha capitaneado la campaña electoral. El líder de los socialistas ha insistido este viernes en que la papeleta del PSOE es la única para frenar a la extrema derecha, representado por Vox y la agrupación ultra de Alvise Pérez.
"No hay una ultraderecha buena y una mala" sino que "hay una ultraderecha mala y hay una derecha aún peor que mala, que pacta con la ultraderecha como es el Partido Popular [...] Y a esos dos los vamos a ganar", ha remarcado Sánchez que también ha confesado que quiere darse el "gustazo" de ganar a PP y Vox. "Volvamos a dar una lección al mundo, un ejemplo a Europa" de que en España se "para a la ultraderecha" ha pedido sobre el atril del pabellón Fernando Martín de Fuenlabrada.
En esa línea ha insistido la candidata socialista, Teresa Ribera, quien ha pedido "votar con la zurda" este domingo frente a aquellos que solo quieren "menos Europa, menos derechos, menos libertades y más fronteras y muros". "No encontramos a nadie enfrente, ¿habéis oído alguna propuesta?", se ha preguntado Ribera este viernes en el cierre de campaña, que ha querido dejar claro que solo escucha cómo "sacar a Sánchez de la Moncloa" o cómo "hacer alianzas extrañas en contra de los intereses de los españoles".
Por su parte, la candidata popular del 9J, Dolors Montserrat, ha asegurado que "no vamos a permitir que el populismo que golpea a tantos países de Latinoamérica llegue también a España". En ese sentido, ha pedido que el voto de la derecha se concrete en el PP porque, resaltan, es el que "más duele" a Sánchez, dado que "todos los demás lo engordan", ha añadido en su turno de palabra González Pons, en referencia a Vox.
Polémicas decisiones judiciales de cara al 9J
En este final de campaña, además, varias decisiones judiciales están condicionando las últimas horas antes de que se abran las urnas el domingo. En Madrid, el fin de semana se vivirá una situación surrealista: varias manifestaciones inundarán las calles de la capital en plena jornada de reflexión e incluso el domingo durante la votación.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha autorizado concentraciones para rezar contra la ley de amnistía ante la sede del PSOE de la madrileña calle de Ferraz en la jornada de reflexión y en la jornada electoral, los días 8 y 9 de junio.
El PSOE ha recurrido esta decisión y ha solicitado al Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) que paralice de manera urgente la convocatoria.