Israel dice haber interceptado un misil de Hizbulá cuyo objetivo era la sede del Mosad en Tel Aviv

El intercambio de misiles entre la milicia chíi de Hizbulá e Israel continúa en un Oriente Medio que ve con temor la escalada del conflicto que ya se ha extendido de Gaza a Líbano. Allí ya son miles los desplazados y centenares los muertos por los ataques israelíes que han provocado a su vez el desbordamiento de los hospitales libaneses. En definitiva, una escalada bélica que no cesa e, incluso, avanza.

Prueba de ello es que Hizbulá ha lanzado por primera vez un misil con el objetivo en la capital del Estado judío, Tel Aviv. En concreto, se pretendía atacar a una de las bases que el servicio de inteligencia israelí, el Mosad, cuenta cerca de la ciudad. No obstante, el sistema de defensa antiaérea de Israel -conocido como la Onda de David- ha podido interceptarlo, tal y como se puede observar en las imágenes sobre estas líneas.

"Los combatientes de la Resistencia Islámica dispararon este miércoles sobre las 6.30 (3.30 GMT) un misil balístico tipo 'Qader-1' contra el cuartel general de la comandancia del Mosad en los suburbios de Tel Aviv, responsable del asesinato de líderes", indicó Hizbulá en un comunicado.

No obstante, el portavoz castrense para la prensa internacional, Nadav Shoshani aseguró que el objetivo del ataque era la ciudad de Tel Aviv "en general" y puso en duda que estuviera dirigido contra la sede del Mosad, tal y como había reivindicado la milicia chíi. Asimismo, el Ejército de Israel ha informado de que alrededor de las 6:30 de la mañana hora local, las sirenas antiaéreas sonaron en la capital como en la urbe de Netanya y sus áreas circundantes, si bien no hubo heridos ni daños.

El mismo comunicado castrense apunta a que la Fuerza Aérea israelí atacó esta mañana el lanzador desde el que supuestamente se disparó el misil contra la capital del Estado Judío y que estaría ubicado en la zona sureña de Líbano conocida como Nafakhiyeh. Además, durante la noche, continuó atacando el sur y este del país vecino contra miembros de la milicia chií, así como instalaciones de almacenamiento de armas. Se trata del tercer día consecutivo de cruce de bombardeos en la frontera que estos países comparten.