Nueva ofensiva en la frontera
Israel mata a un líder de la Yihad Islámica en un bombardeo en Gaza que deja ocho muertos y 44 heridos
Israel ha asegurado tras el ataque que no permitirá "que los grupos terroristas dicten la agenda en las localidades y fronteras israelíes". La Yihad Islámica ha respondido: "El enemigo debe entender que no hay forma en que nos vayamos a rendir"
El Ejército israelí ha anunciado este viernes el comienzo de una operación de bombardeo contra objetivos de la organización terrorista Yihad Islámica en la Franja de Gaza tras varios días en estado de alerta por posibles represalias de la organización después de la detención en Cisjordania de un alto cargo del grupo. Los primeros minutos de la llamada operación 'Amanecer' han comenzado con el anuncio de la muerte de un comandante de las fuerzas militares de Yihad Islámica en el norte de Gaza, identificado como Taisir al Jabari, una muerte que ha sido confirmada por la propia milicia, según ha informado el diario 'The Times of Israel'.
El Ministerio de Sanidad gazací ha informado de que el ataque perpetrado por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) ha dejado ocho palestinos muertos y 44 heridos. "El número de mártires ha aumentado a siete, incluida una niña de cinco años, como resultado de una agresión israelí contra la Franja de Gaza", ha indicado el Ministerio en un mensaje difundido a través de su cuenta de Twitter. Por su parte, las FDI han estimado que, por el momento, la operación se ha saldado con "entre diez y veinte terroristas muertos" después de golpear al menos seis zonas del norte de la Franja de Gaza, entre ellas el barrio gazací de Rimal.
Además, han informado de que el Ejército ha desplegado baterías adicionales del sistema de defensa antiaéreo conocido como 'Cúpula de Hierro' en el centro de Israel y Jerusalén. El primer ministro israelí, Yair Lapid, y el ministro de Defensa, Benny Gantz, han asegurado que "no permitirán que los grupos terroristas dicten la agenda en las localidades y fronteras israelíes", tal y como han señalado en un comunicado conjunto en el que han recalcado que el Gobierno no dejará que estas organizaciones "amenacen a los ciudadanos israelíes".
Israel no puede ser rehén de un grupo terrorista"
"Cualquiera que busque hacer daño a Israel debe saber que le pillaremos. Las fuerzas de seguridad actuarán contra los terroristas de Yihad Islámica, eliminarán la amenaza para los ciudadanos de Israel", ha aseverado Lapid. Gantz ha reiterado que su deber es el de proteger las comunidades israelíes. Está previsto que ambos vuelvan a hacer declaraciones en la sede de las FDI en Tel Aviv sobre las 18.60. Mientras, la ministra del Interior israelí, Ayelet Shaked, ha recalcado que Israel "no puede ser rehén de un grupo terrorista" y ha aseverado que la situación "puede llevar tiempo" dado que "no se puede saber qué pasará con el conflicto".
Yihad Islámica responde: "La resistencia se mantiene"
Desde Yihad Islámica han asegurado que "no existen líneas rojas ni dónde detenerse". "Es un día destinado a la victoria y el enemigo debe entender que no hay forma en que nos vayamos a rendir. La resistencia se mantiene unida", ha manifestado Ziad al Najala, secretario general. "Tendremos mártires en esta campaña, pero seguiremos hasta el final. Israel continúa con sus violaciones en Cisjordania y Jerusalén. La resistencia sobrevivirá a esta guerra con coraje y heroísmo y la victoria será el regalo del pueblo palestino", ha afirmado, según informaciones recogidas por el diario 'Haaretz'.
Al Jabari era el sucesor de Baha Abu al Ata, muerto en noviembre de 2019 en un ataque aéreo israelí. La operación provocó dos días de enfrentamientos entre el Ejército israelí y Yihad Islámica que se saldaron con al menos 34 miembros del grupo terrorista muertos y 111 heridos. Los bombardeos de este viernes tienen su motivo inmediato en una redada efectuada el lunes por las fuerzas israelíes en un campamento de refugiados de Yenín que se saldó con la muerte de un adolescente palestino y la detención de Basam Saadi, un alto cargo de Yihad Islámica, y su yerno Ashraf al Jada. La organización prometió represalias tras la operación.