Se para para investigar
Janssen en EEUU: solo seis casos de trombos notificados de siete millones de dosis administradas
El caso de la vacuna de Johnson &Johnson es similar al de Astrazeneca que en Europa, hasta el 4 abril se han confirmado 222 casos de 34 millones de vacunaciones.
Los reguladores sanitarios de Estados Unidos han pedido la suspensión de la vacunación con Janssen para investigar seis casos de trombosis notificados en las últimas horas. Son seis casos entre los más de 6,8 millones de dosis administrados en ese país de la vacuna J&J, según datos oficiales hasta el 12 de abril.
Es un caso similar al de Astrazeneca. Según los datos de la EMA, hasta el 22 de marzo se detectaron 86 casos de trombos en la UE, con 18 fallecimientos. En cambio, hasta el 4 abril son 222 los casos confirmados, pero de un total de hasta 34 millones personas vacunadas. Es decir, según esta incidencia, solo se da un caso de trombos por cada 100.000 pinchazos (aunque desde Europa remarcan que esta puede variar en algunos países, según su capacidad de rastreo).
En este sentido, la directora general de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, María Jesús Lamas, informó hace unos días que "el balance beneficio-riesgo de la vacuna sigue siendo positivo". De hecho, en España los casos se pueden contar con los dedos de una mano, también por la baja frecuencia de la vacuna en comparación con otros países.
En España los casos se pueden contar con los dedos de una mano
Asimismo, según Lamas, "el beneficio de la vacuna ha sido demostrado en la prevención del COVID-19 y reducción de la hospitalización y muerte", aunque defiende la precaución con la que han actuado hasta ahora las autoridades sanitarias: “Pese a la poca frecuencia con la que ocurren es importante destacar la importancia del diagnóstico temprano”, destacaba.
La Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) ha admitido un "posible vínculo" entre la vacuna de AstraZeneca y una serie de escasos trombos entre algunos pacientes que habían recibido la inyección. Pero las autoridades insisten, precisamente, en esto último: los casos son tan infrecuentes que, de 100.000 pinchazos, apenas uno registra consecuencias de este tipo.