LA OPOSICIÓN ACUSA A NICOLÁS MADURO
Al menos una mujer muerta por disparos en Caracas durante la consulta opositora de Venezuela
Grupos armados sembraron el pánico en el sector de Catia, en el oeste de la capital venezolana durante la consulta organizada por la oposición sobre la Constituyente de Maduro y mataron a Xiomara Escot, una mujer de 61 años.
El ataque tiñó de sangre una jornada marcada hasta ese momento por la normalidad y la participación en una consulta no reconocida por el oficialismo, en la que la oposición pide al pueblo que rechace la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) impulsada por el presidente Nicolás Maduro para modificar la Carta Magna.
La tensión en la zona comenzó con la llegada de un camión con partidarios del Gobierno y un equipo de sonido que difundía consignas a favor de la Constituyente. El vehículo provenía de uno de los liceos abiertos por el Poder Electoral para llevar a cabo un ensayo general de la votación del próximo 30 de julio, una decisión calificada de irresponsable por dirigentes opositores que creían que disparaba el riesgo de conflictos en las calles durante la celebración de los dos procesos.
Ante la presencia del camión, que iba acompañado de partidarios de Maduro que se desplazaban a pie, la Policía formó una barrera que separaba a los oficialistas de quienes habían acudido a votar y coreaban lemas contra el Gobierno en el exterior de la Iglesia del Carmen, donde depositaban las papeletas contra la Constituyente.
Tras un acalorado intercambio de gritos y eslóganes políticos, la Policía avanzó hacia los vecinos que iban a votar en la consulta, propiciando con ello el avance de las camisas rojas chavistas. Fue entonces cuando se presentó en el lugar una columna de una veintena de motorizados que insultó y amenazó a los detractores del Gobierno haciendo repetidamente el gesto de que sacarían armas de fuego y arrojando después objetos.
Una serie de detonaciones provocó la huida de buena parte de quienes iban a las urnas, muchos de ellos se escondieron en el interior de la iglesia y los que ya no pudieron entrar por falta de espacio se quedaron en el exterior.
Otro grupo de motorizados llegó en ese momento acompañado de más gente a pie a las inmediaciones de la iglesia y parte de esta segunda columna llevaba armas de fuego y disparó al aire.
La Policía Nacional Bolivariana (PNB) intervino e intentó retener a los que habían provocado la violencia, que abalanzaron sus motocicletas contra quienes encontraban a su paso y emplazaron a los que no habían podido entrar en el templo a que abandonaran la avenida Sucre, donde ocurrieron los hechos. Un grupo se dirigió entonces hacia quienes corrían para irse y empezaron a disparar a quemarropa a quienes escapaban.