PRIMERA RESPUESTA DE OBAMA
Obama rompe su silencio para responder al veto de Trump: "Los valores estadounidenses están en peligro"
Barack Obama apoya las manifestaciones de ciudadanos norteamericanos contra las políticas migratorias de Donald Trump, afirmando que "los valores estadounidenses están en peligro".
El expresidente de EEUU, Barack Obama, consideró que "los valores estadounidenses están en peligro", al tiempo que señaló estar "alentado" por el compromiso social en el país contra las medidas migratorias adoptadas por el actual presidente, Donald Trump.
"Ciudadanos ejerciendo su derecho constitucional de reunión, organización y haciendo que sus voces sean escuchadas por los oficiales electos es exactamente lo que esperamos ver cuando los valores estadounidenses están en peligro", informó el portavoz de Obama, Kevin Lewis, en un comunicado.
Esta es la primera declaración de Obama tras dejar la Casa Blanca el pasado 20 de enero, en que Trump asumió la presidencia del país. "En su discurso oficial final como presidente, (Obama) habló sobre el importante papel de los ciudadanos y cómo todos los estadounidenses tienen la responsabilidad de ser los guardianes de nuestra democracia, no sólo durante las elecciones, sino todos los días", reiteró su portavoz.
Lewis también se refirió a la insistencia de Trump en que su decisión de detener temporalmente a los ciudadanos de siete países de mayoría musulmana y frenar el recibimiento de refugiados sirios en Estados Unidos es similar a una decisión de Obama de 2011.
"Con respecto a las comparaciones con las decisiones de política exterior del presidente Obama, como hemos escuchado antes, el presidente fundamentalmente no está de acuerdo con la noción de discriminar a los individuos debido a su fe o religión", reiteró Lewis.
Trump ha causado una enorme controversia y ha soliviantado a medio mundo con la orden ejecutiva firmada el pasado viernes, como herramienta para luchar contra el terrorismo yihadista.
El decreto ley suspende el ingreso en EEUU de todos los refugiados durante 120 días, así como la concesión durante 90 días de visados a siete países de mayoría musulmana con historial terrorista (Libia, Sudán, Somalia, Siria, Irak, Yemen e Irán) hasta que se establezcan nuevos mecanismos de vigilancia más estrictos.