Día de la Victoria en Rusia
Rusia se blinda para celebrar su Día de la Victoria con la vista puesta en el cielo por los drones
Zelenski anunció este lunes que Ucrania se sumaba al resto de Europa de cara a la celebración del Día de la Victoria contra el Nazismo, celebrándolo el 8 de mayo en lugar del día 9, como hará Rusia este martes.
Rusia ha celebrado el Día de la Victoria sobre la Alemania nazi en medio de estrictas medidas de seguridad, sobre todo junto a la plaza Roja, ante posibles actos de sabotaje ucranianos, mientras redoblaba sus ataques con drones contra Ucrania, donde no menguan los combates.
Por primera vez en muchos años, el escenario de la tradicional parada militar para celebrar la Victoria, que en Rusia se festeja el 9 y no el 8 de mayo debido a la diferencia horaria, ha sido cerrado a cal y canto durante dos semanas, algo que no ocurrió incluso cuando a los desfiles asistían líderes de talla mundial.
Los efectivos de la Policía y la Guardia Nacional fueron puestos en guardia permanente y sus mandos cancelaron todos los permisos y vacaciones del personal. Las medidas extraordinarias de seguridad fueron adoptadas el 26 de abril, mucho antes de que el miércoles pasado dos drones estallaran junto a la cúpula de Palacio del Senado del Kremlin, ataque del que Rusia no titubeó en acusar a Ucrania y cuyas imágenes conmocionaron el país.
En los días anteriores, las autoridades rusas había informado del avistamiento y de la caída de drones supuestamente ucranianos en los alrededores de Moscú. Tras el incidente de los drones en el Kremlin, Moscú, San Petersburgo y, luego, más de la mitad de las regiones del país prohibieron los vuelos de estos aparatos.
Entre las propuestas para redoblar la defensa de infraestructuras importantes como el Kremlin, destacó por lo curiosa la del vicepresidente del Comité de Defensa de la Duma o Cámara de Diputados de Rusia, Alexéi Zhuravliov, quien sugirió crear "escuadrillas de águilas interceptoras" para combatir a los drones.
Nuevo gesto de Ucrania para separarse de Rusia
El 9 de mayo, fecha clave para el nacionalismo ruso, llega marcado por un nuevo gesto de división por parte de Ucrania y con una menor euforia por parte de Rusia en la celebración de su gran día. El Día de la Victoria contra el Nazismo tiene lugar este martes con muchas ciudades, incluida Moscú, cancelando por motivos de seguridad el Regimiento Inmortal, la marcha en la que los rusos conmemoran con fotos sus familiares caídos en la Gran Guerra Patria y a los que se suman desde el año pasado los fallecidos en Ucrania.
En 2022, primer 9 de mayo de Rusia en guerra, se mantuvo la procesión ciudadana y el propio Putin marchó en Moscú con la fotografía de su padre por la plaza Roja tras presidir como comandante en jefe el tradicional desfile militar, que también ha sido cancelado ya en seis regiones rusas, la anexionada Crimea y 21 ciudades del país.
Ahora, este día llega tras el anuncio del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, de desmarcarse de este 9 de mayo. Antes, celebraban este Día de la Victoria junto a Rusia. Ahora, lo harán junto a Europa los próximos 8 de mayo, celebrando el Día de Europa ese día. "He decidido establecer que el Día de Europa se celebre en Ucrania todos los años el 9 de mayo junto con los países de la Unión Europea", aseguró Zelenski, que registró esta ley en la Rada Suprema.
Rusia se refiere a la guerra contra el nazismo como "Gran Guerra Patriótica" y destaca únicamente el papel de la URSS en la victoria. "No permitiremos que nadie se apropie la victoria común de las naciones de la coalición anti-Hitler", declaró el presidente ucraniano, que recalcó que "las naciones de Europa, de América, Asia, Australia, África, tienen su propia historia en esta guerra".
También apostó Zelenski por una victoria de Ucrania sobre la Rusia de Vladimir Putin, la cual "será derrotada como el nazismo fue derrotado".
El papel de Ucrania en la II Guerra Mundial
Según el Instituto de Memoria Nacional de Ucrania, 8 millones de personas que vivían en su territorio, que se convirtió en "uno de los principales campos de batalla en esta guerra", murieron durante la II Guerra Mundial. Millones fueron fusilados o enviados a campos de concentración nazis o deportados a Alemania para ser utilizados como mano de obra gratuita, mientras que cientos de asentamientos fueron arrasados.
Las deportaciones masivas al Lejano Oriente y Asia Central de Rusia, incluida la de todos los tártaros de Crimea, así como la represión armada de la resistencia independentista ucraniana, se produjeron cuando las tropas soviéticas recuperaron el control del territorio de Ucrania en 1944.
Según el Instituto Nacional de la Memoria, la conmemoración de la victoria sobre el nazismo se convirtió en Rusia en un culto destinado a "promover la guerra, encumbrarse sobre otros pueblos, apropiarse de la condición de "principal vencedor" y justificar actos agresivos y la movilización ideológica". "Rusia explota el tema de la Segunda Guerra Mundial para justificar crímenes en Ucrania", dijo el lunes Viktoria Yaremenko, subdirectora del instituto, a la emisora pública 'Suspilne'.
Vladimir Putin estará acompañado de gran parte de los líderes de los Estados que estuvieron bajo influencia soviética, en lo que se podría interpretar como una señal de fortaleza y apoyos internacionales en el marco de la invasión de Ucrania, país que cuenta con el apoyo de gran parte de la comunidad internacional, incluidos Estados Unidos y la Unión Europea.