Sucedió después del discurso del monarca
Una senadora aborigen irrumpe en la visita de Carlos III a Canberra: "No eres nuestro rey"
La senadora Lidia Thorpe grita "usted no es nuestro rey" en un acto de reivindicación por los derechos indígenas, mientras el monarca afronta críticas y un llamado a un nuevo referéndum republicano.
Canberra fue el escenario de una intensa protesta durante la visita del rey Carlos III al Parlamento australiano, donde la senadora independiente Lidia Thorpe interrumpió el evento gritando: "¡Usted no es nuestro rey!". El altercado ocurrió justo después del discurso del monarca.
Thorpe, reconocida defensora de los derechos de los pueblos indígenas, continuó su protesta al afirmar: "¡Habéis cometido genocidio contra nuestra gente, devolvednos nuestras tierras!", mientras era escoltada fuera del recinto por la seguridad. Su discurso, cargado de emotividad, incluyó un llamado a la firma de un tratado con las Primeras Naciones antes de considerar a Australia como una república, argumentando que "la Corona invadió este país y nunca hemos cedido la soberanía de estas tierras".
La visita del rey Carlos fue marcada también por la notable ausencia de seis líderes regionales que se unieron simbólicamente al Movimiento Republicano de Australia, que clama por un nuevo referéndum para desvincularse de la monarquía, 25 años después del último intento. A pesar de la protesta, el primer ministro Anthony Albanese, aunque republicano, elogió el respeto del rey hacia los australianos, incluso en medio de debates sobre el futuro constitucional del país.
La respuesta a la manifestación fue variada, con el ex primer ministro Tony Abbott describiendo la intervención de Thorpe como un "acto desafortunado de exhibicionismo político". La presión sobre la monarquía se intensificó durante el fin de semana, cuando manifestantes gritaron "Not my king!" ("No es mi rey") a su llegada a la iglesia anglicana de Santo Tomás.
La visita de seis días de Carlos III a Australia, su primera gira fuera de Europa tras el diagnóstico de un cáncer no especificado, se ha llevado a cabo con una agenda reducida, evitando cenas de gala y otros eventos ostentosos. A medida que se acerca la cumbre de la Mancomunidad de Naciones en Samoa, el monarca se enfrenta a un creciente escepticismo sobre su papel y la relevancia de la monarquía en la sociedad australiana actual.