Solo en una celda, con la luz siempre encendida y una ventana opaca: así trata de evitar EEUU otra fuga de película de 'El Chapo'

'El Chapo' Guzmán va a llegar al juicio vigilado por un ejército de coches abriéndose paso por el centro de Nueva York, y se estudia cómo poder hacerlo durante los 4 meses que va a durar el juicio.

Aparecerá sin su bigote, si sigue como la última vez que lo hemos visto y con una mirada mucho menos desafiante que la que tenía cuando encaraba los medios tras ser capturado por última vez en México.

'El Chapo', el rey del cartel de Sinaloa, padrino de la droga y material de celuloide, se enfrenta a 11 acusaciones que pueden costarle la cadena perpetua aunque no la pena de muerte porque ese fue el requisito de México para extraditarlo.

Llegó a EEUU un año y medio antes, con dos manos agarrándole sin tregua y un grupo de agentes de élite custodiando porque no podía repetir México el ridículo que le costaron las imágenes en las que 'El Chapo' fue a ducharse y de repente se evaporó de una de sus prisiones de máxima seguridad.

Ahora permanece solo en una cárcel blindada de Manhattan, con la luz siempre encendida, una única hora de ejercicio al día, con sus conversaciones grabadas y una ventana opaca.

Imposible comprar voluntades ni dentro ni fuera de la cárcel. Los nombres de los integrantes del jurado no se difundirán y parece que por primera vez, 'El Chapo' tendrá que enfrentarse sin 'plan b' a las consecuencias de sus actos. Y es que uno de cada cuatro adictos a la cocaína en Estados Unidos en las últimas décadas consumía lo que él introducía en el país.