Alto cargo militar

Ucrania mata al militar ruso responsable de las fuerzas de defensa nuclear con un patinete bomba en pleno Moscú

Escalada bélica Este atentado supone un ataque inédito de parte de Ucrania en suelo ruso no visto desde el inicio de la invasión en febrero de 2022. Rusia ha prometido venganza.

Golpe a Rusia en su propia capital, en Moscú. A primera hora de la mañana de este martes, los servicios secretos ucranianos han asesinado a Igor Kirílov, el hombre de Vladimir Putin que estaba al mando de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de Rusia. El asesinato se ha producido a las seis y once de la mañana. Igor salía de un edificio residencial en Moscú junto a un asistente cuando un patinete eléctrico, con una bomba escondida, explotaba delante de él.

Frente a la puerta de ese edificio residencial han permanecido los cadáveres de Igor y su asistente. Todo ha tenido lugar en una avenida muy céntrica de Moscú, a menos de siete kilómetros del Palacio del Kremlin, la residencia de Putin.

Detrás de este atentado está Ucrania. Han sido sus servicios secretos los que han reconocido la autoría. De hecho, han tardado muy poco en hacerlo porque esta vez querían presumir de su gesta. Igor Kirílov estaba en su punto de mira. Ha sido un golpe durísimo para Putin, además, en el centro de la capital.

Los servicios especiales de Ucrania han reivindicado este martes la autoría del atentado con bomba perpetrado en la capital de Rusia, Moscú. Fuentes del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) citadas por la agencias ucranianas de noticias Ukrinform y UNIAN han afirmado que el atentado ha sido una operación especial llevada a cabo por el organismo, antes de recalcar que Kirillov "era un criminal de guerra y un objetivo totalmente legítimo".

Así, han subrayado que Kirillov "dio orden para usar armas químicas prohibidas contra el Ejército ucraniano" y han agregado que "un final así de ignominioso es lo que les espera a todos los que matan ucranianos". "El castigo por los crímenes de guerra es inevitable", han zanjado.

Este es el motivo por el que el propio servicio de seguridad había declarado un día antes a Kirílov sospechoso de crímenes de guerra, haber ordenado el uso de armas químicas contra el Ejército ucraniano.

Un patinete bomba

Según el Comité de Instrucción de Rusia (CIR), la bomba ha sido accionada cuando Kirílov, de 54 años, salía de su domicilio acompañado de su ayudante, que también ha muerto en el atentado. Los investigadores han establecido que el artefacto explosivo, de una potencia equivalente a 300 gramos de trilita, se hallaba en un patinete eléctrico que estaba junto al portal del edificio de viviendas, situado en la avenida Riazanki, en el sureste de la capital rusa.

Kirílov, al frente de defensa radiológica, química y biológica de Rusia desde 2017, ofrecía regularmente comparecencias de prensa en las entre otros asuntos aludía a "laboratorios biológicos estadounidenses" en Ucrania. El teniente general, que ostentaba el título de Héroe de Rusia, tenía previsto reunirse este martes con un grupo de periodistas.

Rusia promete venganza

Dmitry Medvedev, vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, ha dicho este martes que el liderazgo ucraniano enfrentará una venganza inminente por el asesinato de un alto general ruso, según ha informado la agencia de noticias RIA. "Al darse cuenta de la inevitabilidad de su derrota militar, lanza ataques cobardes y despreciables en ciudades pacíficas", ha dicho.

El teniente general fallecido Igor Kirillov, jefe de las tropas de protección nuclear, biológica y química de Rusia.Reuters