Monstruo de Francia
Uno de los acusados del caso Gisèle Pelicot define las violaciones como "una escena de libertinaje"
Otro de los acusados, Lionel R., sí ha admitido los hechos. Ha manifestado que se trata de una "violación involuntaria" y describe lo ocurrido como un juego entre la víctima y su marido. El acusado ha justificado que nunca preguntó por el consentimiento de ella por esta razón.
Este jueves ha tenido lugar una nueva sesión del juicio contra los 51 hombres acusados de violar a Gisèle Pelicot, la mujer cuyo marido drogaba y ofrecía para que la agredieran sexualmente. Por primera vez, en la sala se han visionado tres vídeos y 10 fotografías de algunas de las violaciones que sufrió Gisèle. En ellas se ve a la víctima inconsciente, sin gesticular y sin moverse. Sobre ella, dos hombres sin límite.
Fuentes de laSexta que han accedido a la sala donde se ha celebrado el juicio aseguran que "difícilmente alguien que ha visto esas imágenes puede decir que son escenas consentidas". "A los periodistas que estábamos en la sala nos ha costado mucho mantener la mirada en esas pantallas", afirma, y añade que, quienes sí la han quitado son "los acusados": "La mayoría no miraban esas imágenes y se tapaban los oídos", describe la periodista. En cambio, Gisèle "no ha quitado los ojos de las escenas".
La víctima ha tenido que revivir aquellos momentos de horror en una sala que ha sido previamente vaciada de público, a petición de la víctima, y a la que sí han podido acceder los periodistas.
En uno de los vídeos se puede ver cómo Jaques C. violaba a Gisèle Pelicot. Tras esto, los abogados de la defensa y la acusación le han preguntado si respeta a las mujeres y no ha dudado en responder que "sí". A esto añadía que "no" se consideraba un violador y ha descrito el vídeo como "una escena de libertinaje".
Otro de los acusados, Lionel R., sí ha admitido los hechos. Él tiene 72 años y ha asegurado que violó a Gisèle, pero ha dicho que se trataba de una "violación involuntaria", es decir, describe lo ocurrido como un juego entre la víctima y su marido. El acusado ha manifestado que, por esta razón, nunca preguntó por el consentimiento de ella.
Las declaraciones de los acusados de esta sesión del juicio han contradicho lo que declaró Dominique Pelicot, marido de Gisèle, y han afirmado que no se les pidió que usaran preservativos y tampoco que presentaran pruebas que demostraran que no estaban contagiados de VIH, tal y como declaró el monstruo de Aviñón esta semana.