LA MARCHA AVANZA RUMBO HACIA LA CAPITAL
El alcalde de Caudete pierde los nervios contra los miembros de la marcha por la dignidad
Con muy poco talante afrontó el alcalde del municipio de Albacete la marcha por la dignidad que atravesó su pueblo camino de Madrid. Los manifestantes pidieron permiso para dormir pero él sólo aceptó si pagaban. Cuando pasaron frente al Ayuntamiento le dedicaron varias consignas. A Jose Miguel Mollá se le acabó enseguida la paciencia y se encaró de malas maneras.
José Miguel Mollá, alcalde del municipio de Caudete, en Albacete, actuó con poca educación con los miembros de la marcha por la dignidad. Ante los gritos a las puertas del ayuntamiento de los integrantes de la marcha, salió desafiante a pedir explicaciones, pero las respuestas no le convencieron.
Instantes depués, el choque se volvió más visceral, con cruce de insultos incluido. Los intregrantes de la marcha se quejan de los problemas que les puso el alcalde para hacer noche en el municipio. Sin embargo, José Miguel Mollá lo niega y dice que se le provocó.
Según ha declarado a un equipo de laSexta, considera que los manifestantes, "no tienen derecho a insultar" y afirma que "si le buscan le encuentran".
Al respecto, Agripa Hevás, miembro de la marcha, califica su respuesta de "actitud desafiante, chulesca y caciquil".
Por el momento, la marcha continúa su camino hacia Madrid y tiene previsto su llegada el día 22. Reivindica un trabajo digno, rechazan el pago de la deuda y muestran su disgusto también con el anteproyecto de ley ciudadana.