Alvise Pérez prometió favores al empresario que pagó los 100.000 euros para su campaña: "Puedo poner una legislación relativa a Bitcoin"

La Fiscalía General del Estado (FGE) ha remitido al Supremo una denuncia contra el eurodiputado de Se Acabó La Fiesta Alvise Pérez, por su relación con la presunta estafa piramidal de Madeira Invest, de la cual habría recibido 100.000 euros para promocionar la plataforma de inversión en actos públicos. La denuncia, presentada por el responsable de Madeira Invest, Álvaro Romillo.

No solo eso, sino que dentro de la denuncia al Ministerio Público se recogía una serie de audios y todos los mensajes que Alvise Pérez se intercambio con el empresario. Básicamente, en esos escritos se desvela que tenían un acuerdo en el que el agitador le iba a dar visibilidad a través de su comunidad digital a cambio de obtener seguridad financiera para eludir lo que él llama la "persecución del Estado". Por lo tanto, con dichas conversaciones se deja al descubierto que el objetivo de Alvise Pérez era eludir el control del Tribunal de Cuentas.

Además de esta seguridad financiera, Alvise Pérez también prometió cambios legislativos para echarle una mano al empresario cuando fuera llave del Gobierno de Feijóo y Abascal. Unas palabras que se han revelado en unos audios publicados por 'elDiario.es': "Las encuestas me encaminan cada vez más cerca de ser llave de Gobierno con Feijóo y con Abascal y esto significa que yo, en un posible acuerdo de Gobierno, puedo poner como 'sine qua non' una serie de legislación relativa a Bitcoin. O sea, que esto es un pulso en realidad entre lo que es el Estado-nación y lo que es la libertad financiera. Por eso estoy intentando ver cómo afronto ese asunto, porque quiero defender... Bueno, no sabía si defender tu negocio, defender Bitcoin... No sé cómo hacerlo y, digo, lo voy a hablar antes contigo".

Esta conversación tuvo lugar hace apenas dos semanas. Participan Alvise Pérez, difusor de bulos y eurodiputado, y Álvaro Romillo, empresario del mundo del bitcoin y otras criptomonedas. Uno recibió dinero y el otro pensó en la influencia. El 6 de abril, unieron sus destinos. Ese día, el entonces candidato al Parlamento europeo participó en un acto del club de finanzas de Romillo. Y lo hizo como si estuviera en uno de sus mítines.

Pero esta participación Alvise Pérez no la iba a hacer porque sí. Tenía un objetivo: conseguir 300.000 euros. Se los pidió a Alberto Romillo con una exigencia muy particular: tenían que ser fondos que no fueran controlados por el Tribunal de Cuentas. Pasados tres días del primer evento en el que coinciden, Álvaro Romillo recibe un mensaje de Alvise Pérez en el que le traslada que lo primero que necesita son "fondos que no requieran ser controlados por el Tribunal de Cuentas".

Quería esos fondos para pagar mítines y publicidad del partido, pero la ley de financiación de partidos no se lo permite, puesto que según dicha ley, una misma persona no puede aportar más de 50.000 euros anuales a un partido y además, todas las donaciones superiores a 25.000 euros deben notificarse. Alvise intentaba esconder su dinero, pero además especifica que necesita esos fondos para hacer frente a multas que tiene pendientes.

El objetivo: entre 300.000 y 360.000 euros. Nos vamos entonces al 25 de mayo, cuando Alvise le pide a Alvaro Romilla que cree una cartera de criptomonedas donde sus seguidores puedan enviarle donativos e inmediatamente en el grupo de telegram. Pero cuando CryptoSpain le dice al agitador qué cantidad llevan recaudada a él le parece poco.

Y solo un día después, hay un nuevo mensaje, una nueva cantidad y una ubicación. El mensaje del empresario es el siguiente: "He estado repasando y si te parece bien mañana puedes pasar por el sentinel a por 100K". Así que el día 27 de mayo, Alvise se dirige a estas oficinas que prometen total confidencialidad y se lleva los 100.000 euros en su propio bolsillo.

La Fiscalía del Supremo investigará a Alvise

En su escrito presentado por el responsable de Madeira Invest, Álvaro Romilla, el empresario explica que en 2021 comenzó a asesorar a particulares y empresas como experto en "elusión fiscal", para lo cual puso en marcha la plataforma Madeira Invest Club, que ofrece a los inversores la compra de obras de arte digitales con el compromiso de recomprarlas en un plazo determinado.

El dinero recaudado de este modo, prosigue el escrito, se custodia sin ser fiscalizado ni controlado en un local situado en Madrid y denominado Sentinel, que cuenta con más de 5.000 cajas de seguridad anónimas. Con el dinero recaudado se creó un "entramado de sociedades", relata Romilla, dedicadas a negocios de restauración, autocine, festivales de música o tiendas, mediante las cuales pudo hacer frente a los compromisos de recompra con sus clientes.

Pero recientemente "la situación se hizo insostenible", razón por la cual decidió "ponerse a disposición de las autoridades para colaborar en el caso de que los hechos sean constitutivos de delito". Entre las actividades descritas por Romilla en su escrito figura la entrega el 27 de mayo de 2024, antes de las elecciones europeas, de 100.000 euros a Alvise, lo que podría constituir un delito de financiación irregular.