En busca del 'sí' definitivo para ser presidente

Armengol anuncia que el debate de investidura de Sánchez se celebrará el 15 y 16 de noviembre

Dos meses después de la fallida votación para investir a Feijóo presidente, llega el turno del candidato socialista. Tras alcanzar acuerdos con Junts, ERC, PNV, BNG y Bildu, Sánchez se asegura los números necesarios para revalidarse en el cargo.

Pedro Sánchez ya tiene fecha para intentar ser investido presidente del Gobierno. Tras el fracaso de Alberto Núñez Feijóo, presidente de los populares, para hacerse con una mayoría parlamentaria que le permitiera tomar las riendas del Ejecutivo en los próximos cuatro años, llega el turno del candidato socialista. El debate y la votación de investidura tendrán lugar el 15 y el 16 de noviembre.

Así lo ha anunciado la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, poniendo fin de esta manera a las continuas críticas del bloque conservador, que le afeaban no marcar inmediatamente una fecha para que Sánchez se sometiera a la investidura: "Habiéndome transmitido que ya ha hecho toda la ronda de negociaciones con los diferentes grupos políticos de este parlamento, el candidato nominado por el rey, Pedro Sánchez, ya está en condiciones de ir al debate de investidura".

Tal y como ha explicado la presidenta del Congreso, el debate arrancará con la intervención del candidato a la Presidencia a las 12 horas: "Después se irán desarrollando las siguientes de mayor a menor [número de parlamentarios por formación] del miércoles al jueves, para celebrarse la votación el mismo jueves". Armengol ha señalado también que ya ha informado de las fechas y del proceso a todos los grupos parlamentarios, cuyos portavoces participarán este martes en un encuentro para conocer con detalle cómo se va a desarrollar el proceso.

Así las cosas, Sánchez se presentará el miércoles y el jueves de esta misma semana ante los parlamentarios de la cámara para recabar el mayor número de votos posibles. La investidura del líder socialista se da, en principio, por hecha. Desde las elecciones generales del 23J, el presidente del Gobierno en funciones ha estado negociando con distintos partidos para sumar una mayoría suficiente con la que dar pie a una nueva legislatura.

Esto le ha llevado a mantener intensas conversaciones y difíciles pactos con formaciones nacionalistas e independentistas; especialmente, con ERC y con Junts per Catalunya. Al mismo tiempo, el bloque conformado por la derecha y la extrema derecha ha ejercido una férrea oposición para denunciar las negociaciones de Sánchez con los catalanes; oposición que ha derivado en protestas en distintos puntos de España donde se han dado duros enfrentamientos entre grupos ultraderechistas y la Policía.

Unos hechos que ha denunciado la propia Armengol durante el anuncio de las fechas de la investidura: "Soy una persona que siempre he defendido y defenderé siempre todas las manifestaciones, y ese espacio para que los ciudadanos puedan expresar sus opiniones, sean cuales sean. Pero sí quiero valorar dos cuestiones relevantes: yo creo mucho en el diálogo, en el consenso, para unir a los españoles, y me parece que algunas declaraciones que hemos oído estos días de diferentes líderes políticos más que unir separan, y más que instar a la concordia instan a la separación y a la división".

"Hay que apreciar como nunca la democracia, el diálogo y los valores como forma de entendernos", ha insistido Armengol, que ha aprovechado esta misma intervención para "condenar tajantemente cualquier tipo de agresión, violencia y desacato hacia el orden publico, como se ha visto estos días en algunas calles de España".

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