A finales de los 90
Así hablaba el PP de "perdón y generosidad" con ETA los meses siguientes al asesinato de Miguel Ángel Blanco
El acercamiento de los presos etarras a las cárceles vascas comenzó a hacerse realidad bajo el paraguas del Gobierno de José María Aznar. Era el final de la década de los 90, y el PP hacía un giro en sus relaciones con la banda terrorista.
Las críticas al PSOE por la ley de Memoria Democrática han protagonizado el homenaje del PP a Miguel Ángel Blanco. Un acto en el que el expresidente Aznar ha aquejado la actitud del PSOE. Sin embargo, los guiños del PP a los presos de ETA se hicieron cada vez más grandes a finales de la década de los 90. Apenas un año después del asesinato de Miguel Ángel Blanco, el Gobierno de Aznar accedió a trasladar a los presos de las islas a la Península.
Así lo muestra el vídeo de archivo recuperado y difundido por el periodista y autor Carlos Hernández en la red social Twitter, donde se puede escuchar a un conciliador presidente del PP afirmando haber autorizado contactos con el Movimiento Vasco de Liberación, y afirmaba abrirse al "perdón y a la generosidad": "El Gobierno incorporará una nueva orientación de la política penitenciaria consensuada, flexible y dinámica que acompañe los avances que se vayan produciendo en el aseguramiento de la paz".
En un hilo de Twitter, el periodista ha explicado cuáles fueron los siguientes pasos del Gobierno popular tras el asesinato del concejal, al que tuvieron secuestrado 48 horas en las que chantajearon con matarle si no se trasladaba a los presos etarras a las cárceles vascas.
"Tras el asesinato de Blanco comienzan los rumores de que ETA podría declarar una tregua para negociar. El PP lanza mensajes de "concordia". Solo 4 meses después del crimen, el portavoz del Gobierno afirma que el conflicto no tiene que acabar una ETA derrotada", indica Hernández.
Así, adjunta un audio en el que se puede escuchar a Miguel Ángel Rodríguez afirmar que "no debe haber vencedores y vencidos" en noviembre de 1997. Cuatro meses después, ETA mata a tres concejales populares mientras la formación continua mostrándose partidaria de la "generosidad" del estado para que "se superen cuestiones tan dolorosas en el pasado", tal y como expone el propio Aznar en una entrevista para 'El Mundo' el 1 de marzo de 1998.
En septiembre de 1998, tras el asesinato de otros ediles, ETA da una tregua y el Gobierno de Aznar hace algunos guiños a los presos. "El Gobierno se apresura a acercar a 4 presos a cárceles del País Vasco y concede el tercer grado a otro", explica el periodista. El propio Aznar asegura en una entrevista con 'El País' en octubre del 98 que ETA no tendría por qué pedir perdón por los crímenes, sino "aceptar las reglas democráticas".
Un año y medio después del asesinato de Miguel Ángel Blanco, Aznar anunciaba el inicio del diálogo con la banda terrorista, aplaudiendo los beneficios penitenciarios para sus miembros.
A partir de entonces, se suceden las reuniones, las excarcelaciones y los acercamientos de los presos. "Estamos dispuestos a hacer lo que sea necesario, sin exigencias previas, sin negociar la entrega de armas. Pero la paz depende de ellos", afirmaba el ministro del Interior por entonces, Jaime Mayor Oreja, en una entrevista para Le Monde.
"En resumen: Con el PP bien negociar con ETA y con Otegi, acercar 150 presos y excarcelar a 200. Aunque ETA siguiera activa, hubiera kale borroka y hubieran matado a Miguel A. Blanco y a muchos más un par de años antes. Con la izquierda mal, aunque ETA no exista desde hace 11 años", ha aseverado el periodista en un hilo que ya cuenta con más de 3.000 'me gusta'.