HA SUAVIZADO EL TONO EN SUS INTERVENCIONES
Ataques al referéndum del 1-O y la independencia, pero abierto al diálogo: así ha sido el discurso de Rajoy en el Congreso
Rajoyha aprovechado sus intervenciones en el Congreso, donde ha hablado a petición propia, para marcar los tiempos a Puigdemont en el cumplimiento del requerimiento. No descarta el diálogo, pero siempre dentro de la ley.
Mariano Rajoy ya ha explicado la primera medida del Gobierno tras el pleno en el Parlament en el que se declaró la independencia y se pidió suspender sus efectos segundos después. Con un requerimiento, que ha adelantado en exclusiva laSexta, el Gobierno activa el procedimiento para, si no se atiende, aplicar el artículo 155: "[...]a fin de garantizar el orden constitucional, la convivencia democrática y el normal funcionamiento de las instituciones", según reza el escrito.
El presidente del Gobierno ha querido dejar claro que ahora es el Govern quien debe mover ficha: "Deseo fervientemente que acierte en su respuesta". El requerimiento recoge el calendario más inmediato. Antes del 16 de octubre a las 10:00 horas, Puigdemont debe confirmar si han declarado o no la independencia.
"Es una pregunta de facil y obligada respuesta", ha insistido el dirigente popular. Si responde 'sí', o no responde, se le requerirá que revoquen la declaración, comunicar la decisión a la presidenta y la Mesa del Parlament y confirmar que se ha cumplido íntegramente con todo antes de las 10:00 horas del jueves 19 de octubre.
"Es la respuesta que Puigdemont dé a este requerimiento lo que marcará el futuro de estos acontecimientos en los próximos días", ha aseverado Rajoy durante una de sus intervenciones en el Congreso. Una vez recibido el requerimiento, en caso de no atenderse en el plazo marcado, el Gobierno propondrá un paquete de medidas al Senado que deben aprobarse por mayoría absoluta.
La misma mayoría absoluta que tiene el PP en la Cámara. Y a partir de ahí, el presidente del Gobierno ha continuado con su discurso: "Lo que no es legal no es democrático". Si bien Rajoy ha hablado de diálogo, señala que debe ser dentro de la Constitución: "No hay mediación posible entre la ley democrática y la desobediencia o la ilegalidad". Esto es, una Carta Magna que se ha mostrado dispuesto a modificar, porque dice, no tiene que ser una ley perpetua.