LO HAN REVISADO DURANTE UNA HORA EN SANTO DOMINGO
El avión del príncipe sufre su segunda avería eléctrica en dos meses
El príncipe Felipe vuela ya hacia Honduras para la investidura del nuevo presidente. Su avión ha sufrido una avería eléctrica que le ha dejado en tierra en una escala en República Dominicana. Defensa abrirá una investigación para determinar por qué en dos meses el aparato ha sufrido dos averías y las dos eléctricas.
La delegación del gobierno de Honduras esperaba verle bajar del avión pero tendrá que seguir esperando al príncipe de Asturias porque un fallo en su avión oficial vuelve a dejar en tierra. Su destino era Honduras. Allí participará en la toma de posesión del nuevo presidente, en representación del rey, como ya lo ha hecho en otras 65 ocasiones.
Su avión había salido del aeropuerto de El Salvador, cuando uno de los indicadores del cuadro de mandos empezó a fallar. Por precaución, el piloto decidió volver al aeropuerto dominicano y reparar allí la avería. Se trataba de un fallo eléctrico del indicador del aceite, que según el Ministerio de Defensa quedó solventado en poco más de una hora.
No es la primera vez que al avión oficial del Príncipe sufre una avería. La última fue el pasado mes de noviembre. El Airbus 310 en el que debía viajar a Brasil ni siquiera pudo despegar del aeródromo de Torrejón de Ardoz. El príncipe sólo pudo acudir de modo virtual a su cita con los empresarios españoles.
La Fuerza Aérea Española dispone de dos aviones para desplazamientos oficiales, pero en estos momentos sólo uno está disponible. Defensa ya ha anunciado que abrirán una investigación para aclarar por qué el avión oficial del príncipe ha sufrido dos averías eléctricas en menos de dos meses.
Este Airbus fue comprado junto con su gemelo en diciembre de 2000 con el fin de que sustituyeran a los dos viejos Boeing 707 destinados en ese momento al uso de autoridades y que acumulaban un largo historial de averías y fallos técnicos.
Los nuevos aviones, que fueron comprados de segunda mano a Air France, costaron 172 millones de euros, que se pagaron en seis anualidades hasta 2005. Las dos aeronaves fueron acondicionadas en la fábrica de Airbus de Toulouse para su nuevo uso y se estrenaron en septiembre de 2003. Aunque su primer vuelo lo realizó en 1982, cuando se compraron y remotorizaron se estimó que su vida operativa sería de 25 años.