LA ESCULTURA FUE VENCIDA POR EL VIENTO
El Ayuntamiento de Castellón decidirá qué hacer con la escultura de Ripollés
El Ayuntamiento de Castellón decidirá qué hacer con las 36 toneladas de escultura en memoria de las víctimas del terrorismo que se derrumbó el pasado sábado.
La escultura que diseñó Juan Ripollés en memoria de las víctimas del terrorismo en Castellón, a pesar de estar diseñada para aguantar rachas de viento de hasta 150 kilómetros por hora, se vino abajo el pasado sábado con un temporal que apenas llegaba el viento a los 100 kilómetros por hora.
Ripollés se ha dirigido al Ayuntamiento, serio e impasible, según él "a por el culpable de que su escultura se cayera": el ingeniero. Ambos se han encontrado este mediodía en el Ayuntamiento de Castellón para decidir qué harán con la escultura, el homenaje a la paz, de 29 metros y 36 toneladas, que fue derribado por el viento, por suerte sin tocar ningún coche.