Pandemia en Asturias
Asturias no descarta solicitar el estado de alarma y cerrar la hostelería por el aumento de casos
El presidente asturiano asegura que llegará "hasta donde sea necesario" para contener los contagios de coronavirus y, si la situación no se controla, no descarta solicitar el estado de alarma.
El Principado de Asturias no descarta solicitar la aplicación del estado de alarma, como tampoco el cierre de los locales de restauración para contener los contagios de COVID-19. Así lo ha indicado su presidente, Adrián Barbón, que ha dejado claro que "llegará hasta donde sea necesario" para que la situación mejore.
Era una de las comunidades menos golpeada por la crisis sanitaria, pero en los últimos días el aumento de contagios y brotes han llevado al Ejecutivo regional a aumentar las restricciones y volver a una especie defase 2 con modificaciones.
A partir de este viernes se prohibirá el consumo en barras de bares, se limitarán las reuniones a un máximo de seis personas y en los espacios comunes (como en centros comerciales) se establecerá un aforo del 25%. Además, se prohibirá la venta de alcohol a partir de las 22:00 horas.
Estas restricciones llegan con una incidencia de 186,55 casos por 100.000 habitantes. Una media inferior a la del resto de España, pero suficiente para el presidente asturiano para comenzar a imponer restricciones. "Hay que tomar decisiones y no llegar a límites desorbitados", ha apuntado al respecto en una entrevista en 'Cadena Ser'.
Por el momento, los bares y restaurantes tendrán que suspender el servicio en barra y las reuniones se limitarán a seis personas
Si estas medidas sanitarias no son útiles para mejorar la situación epidemiológica, el Gobierno regional no descarta solicitar la aplicación del estado de alarma, así como decretar el cierre de los locales de hostelería y restauración.
"Los datos que tenemos indican que no hay brotes en las actividades culturales, sino que se dan en situaciones en las que nos quitamos la mascarilla, como en las concentraciones familiares, en la hostelería y, en algunos casos, en los gimnasios", ha señalado.
Si estas restricciones no funcionan y "no se da la vuelta a la situación para situarnos por debajo de la incidencia de 100 casos por 100.000 habitantes", no se descartarán nuevas medidas, como el cierre de bares y restaurantes y la solicitud del estado de alarma. "Habría que buscar una compensación económica", ha indicado respecto a una medida tan restrictiva para los hosteleros.
Por el momento, se aplicarán medidas relacionadas con el aforo y se recomienda a la población que se "autoconfine en la medida de lo posible durante las próximas dos semanas". Si se tiene que salir, ha dicho el presidente, es preferible que sea a espacios abiertos porque en los cerrados se "presenta un mayor nivel de contagios por los aerosoles".