Para el PP, "un puñetero escándalo"

El Gobierno cree que el Supremo acusa al fiscal general sin "ninguna base probatoria" y que hace "elucubraciones" sobre Moncloa

El contexto El juez Hurtado emitió un escrito en el que imputaba a García Ortiz en la causa que investiga la filtración del correo de la pareja de Isabel Díaz Ayuso.

El Gobierno ha vuelto a respaldar al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, en relación a la causa que le investiga por un presunto delito de revelación de secretos debido a la filtración de los correos de la defensa de la pareja de Isabel Díaz Ayuso con la Fiscalía. En esta ocasión y a primera hora de este martes, lo ha hecho calificando y descalificando el auto de imputación del magistrado del Tribunal Supremo, Ángel Hurtado, asegurando que se sustenta en elucubraciones.

En concreto, ha sido el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, quien a su llegada a la inauguración del curso selectivo de la 63ª promoción de acceso a la carrera fiscal, ha admitido haber sentido "sorpresa" ante el escrito en el que se imputaba a García Ortiz. De hecho, se atreve a preguntar "con todo respeto, en qué se sustentan algunas de las afirmaciones de ese auto del Tribunal Supremo".

Interrogantes que plantea, ya que "realmente no existe ninguna base probatoria, ninguna prueba, ninguna evidencia de lo que ahí se dice". Entonces, ha sentenciado que no son más que "elucubraciones" sobre las que se demostrará la verdad: "Sinceramente, estoy convencido de que la verdad se abrirá paso y que habrá una resolución del Tribunal Supremo fundamentada en pruebas donde se acredite que el fiscal general cumplió su función, persiguió el delito y contó lo verdad".

Bolaños aludía así a que, según el Gobierno, el fiscal general y su equipo lo que hicieron fue desmentir un bulo difundido por la mano derecha de la presidenta madrileña a través de una nota de prensa en la que se desgranaron las distintas comunicaciones que la defensa de Alberto González Amador había intercambiado con la Fiscalía.

Por todo ello, Bolaños ha recordado que "este Gobierno apoya y respalda no solo al fiscal general sino al último fiscal de este país que persiga el delito y cuente la verdad", ya que "España es un Estado de Derecho con todas las garantías" por lo que "no se puede condenar a nadie si no existen pruebas".

Unas acusaciones de Bolaños contra el Alto Tribunal que el portavoz 'popular' Borja Sémper ha calificado de "puñetero escándalo", al tiempo que se ha negado en "aceptar con naturalidad que un ministro le diga a un juez lo qué tiene que hacer": "Tiene que callar y respetar", ha asegurado ante las preguntas de laSexta.

"Nosotros seguimos defendiendo la separación de poderes y no queremos que los ministros sentencien ni valoren pruebas", ha explicado, para después añadir que "los ministros tienen que acatar como cualquier hijo de vecino las investigaciones judiciales, y en su caso, las resoluciones de sus jueces".