Vinculado a FAES
El candidato del PP al Constitucional defiende su imparcialidad pese a sus vínculos con el partido
El magistrado Enrique Arnaldo ha defendido en el Congreso que "tan importante es la imparcialidad como la apariencia". Su despacho de abogados ingresó casi un millón de euros en contratos con administraciones populares y él mismo estuvo ligado a los casos Palma Arena y Lezo.
El candidato propuesto por el Partido Popular al Tribunal Constitucional, Enrique Arnaldo, ha defendido su idoneidad para el puesto y también que será imparcial en su desempeño, pese a los estrechos vínculos que mantiene con la formación conservadora y que han provocado que los partidos en el Congreso -salvo su promotor- hayan criticado su candidatura.
Arnaldo, que ha sido elegido por el acuerdo entre el PSOE y el PP para renovar las instituciones constitucionales, ha apuntado que "tan importante es la imparcialidad como la apariencia" de la misma. El magistrado ha subrayado que es conocedor de la clase política desde hace tres décadas pero que "no tiene amigos" con responsabilidades públicas. Solo le quedaría uno, un diputado del PSOE, pero ha insistido en que "nunca he recibido mandato de ningún partido".
La candidatura de Enrique Arnaldo se ha puesto en cuestión desde que socialistas y populares anunciaron los nombres que habían acordado para renovar el Tribunal de Garantías. La razón: la fuerte vinculación con el PP y con la fundación FAES. Además, su nombre apareció ligado a algunos casos de corrupción como el Palma Arena o el Lezo. En el primero llegó a estar imputado por un presunto trato de favor, aunque la acusación quedó archivada. En el segundo, unas grabaciones del sumario dieron a entender que intentó buscar fiscales que beneficiasen al expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González. Asimismo, su despacho de abogados firmó contratos públicos por valor de cerca de un millón de euros con administraciones lideradas por los populares.
"No fui considerado responsable, ni acusado por ningún juez ni fiscal", ha dicho Arnaldo, enmarcando estas alegaciones en "épocas pasadas felizmente superadas". Ha aseverado, igualmente, que no va a hablar de "documentos archivados hace diez años".
Solo el PP ha defendido con buenas palabras al candidato. La diputada Isabel Borrego ha considerado que Arnaldo "reúne las características para ser magistrado del Tribunal Constitucional" y ha lamentado "que se deslegitimice" su comparecencia ante la Comisión de Nombramientos del Congreso.
El resto de grupos ha sido muy crítico con la idoneidad del candidato, también el PSOE, pese a que el acuerdo firmado obligue a apoyar el nombre del magistrado. "Por lo que cuenta en su currículum y por lo que nos cuenta, su candidatura genera desconfianza en cuanto a la independencia", ha asegurado el socialista Odón Elorza. El diputado ha procedido a cuestionar una batería de preguntas para sembrar dudas sobre la figura de Arnaldo. "He leído sus artículos y entrevistas y son muy beligerantes contra el Gobierno. ¿No cree que eso cuestiona su imparcialidad y puede ser causa de recusación? ¿Es usted militante del PP?".
Más contundente ha sido el portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal: "Usted es nombrado por ser amigo de alguien del PP. Dudamos de su imparcialidad después de salir en las grabaciones de Lezo".
También Vox ha cuestionado la figura de Arnaldo, que ha calificado su candidatura como parte de un "pacto para debilitar las instituciones". "Del PP cada vez esperamos menos. Ellos sabrán si lo hacen para tapar sus escándalos. El PP da oxígeno a los separatistas y al Gobierno, una traición que no se olvidará", ha censurado el portavoz de extrema derecha, Iván Espinosa de los Monteros.
Espejel defiende que no es amiga de Cospedal
La otra candidata propuesta por los populares, la magistrada Concepción Espejel, también se ha defendido de las críticas por su cercanía a la formación y, en concreto, a la exsecretaria general María Dolores de Cospedal. En un acto cuando era presidenta de Castilla-La Mancha, la exnúmero dos del PP se refirió a ella como "querida Concha". La jueza ha defendido su "imparcialidad", pese a que fue recusada en el juicio de la Trama Gürtel y efectivamente apartada del tribunal que lo juzgó. "Ese motivo (la amistad) fue desestimado en el auto, que decía que parecía injustificado que se alegaran los elogios que se me hicieron en la imposición de la medalla", ha insistido.
En este sentido, ha subrayado que no es amiga de Cospedal. "Es muy fácil montar una campaña de desprestigio contra un magistrado desde determinados sectores de la prensa", ha justificado.
Finalmente, los cuatro candidatos propuestos han sido avalados con 242 votos a favor y 12 abstenciones. No ha habido votos en contra porque tanto Ciudadanos o Vox han salido de la reunión. La semana que viene habrá una segunda votación en el pleno del Congreso que confirmará a los aspirantes.