Actitud lamentable del juez

Cascada de críticas al juez Carretero por su tono y falta de empatía con Elisa Mouliaá

Los detalles Un interrogatorio más que una toma de declaración con cero empatía, sin tacto hacia la víctima, con presión, con un tono insoportable y unas formas reprobables. Es la queja de buena parte de la sociedad y de asociaciones feministas. El Gobierno también se ha mostrado muy crítico.

Crece la cascada de críticas al juez Adolfo Carretero por su interrogatorio a Elisa Mouliaá, la mujer que denunció a Iñigo Errejón. Porque fue eso, un interrogatorio más que una toma de declaración con cero empatía, sin tacto hacia la víctima, con presión, con un tono insoportable y unas formas reprobables. En líneas generales, un actitud lamentable del juez. Es la queja de buena parte de la sociedad y de asociaciones feministas. El Gobierno también se ha mostrado este martes muy crítico con el juez Carretero.

Y todo por las preguntas del juez y, sobre todo, el tono y la falta de empatía. De hecho, Carretero le echa en cara el tiempo que tarda en denunciar: "Es que son tres años, ¿no sería que quería usted algo con este señor y por eso ahora le denuncia?". Unas preguntas carentes de tacto y más teniendo en cuenta que se está dirigiendo a una víctima.

Y la respuesta del juez: que no lo entiende. "Has tardado tres años en denunciar es que no se entiende", aseveraba. Y entre todo eso, le achaca que por qué no fue capaz de "decirlo no quiero esto". Y hay más: Carretero apenas le dejaba contestar Mouliaá llegando a cortarla cuando le explica que si le negó a Errejón tocarla o si se lo dijo explicitamente.

Un interrogatorio que ya se tacha de misógino. Así lo califica la Fundación Mujeres, quien afirma que "la creencia de que las mujeres tienen intenciones ocultas detrás de los hombres". Preguntas, para otros jueces, compañeros de profesión de Carretero, inconcebibles. "La ley establece de forma taxativa que no se pueden plantear preguntas sugestivas", apunta Joaquim Bosch. Mientras la presidenta de la Asociación de Mujeres Juristas Themis subraya que no solo es terrible por el tipo de preguntas, sino por el "lenguaje que utiliza el juez" y lo califica como "una forma de rectivimizar a la víctima".

Por su parte, el abogado de la víctima parece justificarlo: "Yo prefiero este tipo de jueces que son así de duros porque se garantiza de alguna manera que la presunción de inocencia va a caer".

Eso sí, desde el Gobierno la condenada es unánime. La ministra de Igualdad, Ana Redondo, manifiesta que están realmente preocupados por estas declaraciones y este interrogatorio que "puede alejar a las víctimas". Por su parte, la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, afirma lo siguiente: "Lo que he visto ayer no me ha gustado, ni los tonos, ni los comportamientos, son tonos más propios del pasado". Un pasado muy presente aún en los juzgados.