Tras la peor semana de contagios
Varias autonomías piden modificar el estado de alarma ante las reticencias de Sanidad para adelantar el toque de queda
Fuentes del Gobierno indican que todavía no está decidido que se vaya a adelantar el toque de queda a las 20:00 horas, mientras que diversos mandatarios autonómicos insisten en la gravedad de la situación: "No habrá más olas, sino que simplemente no pararán", expresan desde Castilla-La Mancha.
En vísperas del Consejo Interterritorial que se celebra este miércoles, diversas Comunidades Autónomas aumentan su presión para que el Gobierno endurezca sus medidas para frenar la tercera ola de contagios por coronavirus. De hecho, cinco regiones (Andalucía, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Murcia y Euskadi) han pedido públicamente que se redacte un nuevo decreto para adelantar el toque de queda a las 20:00 horas.
Sin embargo, el Ejecutivo comparte una opinión diferente: según el Ministro de Sanidad, Salvador Illa, las restricciones actuales son suficientes para contener el aumento de casos. Tal y como explican fuentes del Ejecutivo a laSexta, a pesar de que hay cinco comunidades que lo han solicitado y otras cinco que están a favor, no está decidido que el Gobierno confeccione un nuevo decreto en su reunión de este miércoles con las CCAA. Un hecho que contrasta con las demandas de los últimos días.
Precisamente, una de las voces más críticas con la posición de Sanidad la lidera el socialista Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha. Según ha afirmado el mandatario en una entrevista en Espejo Público, "si no se le pone freno a la burbuja de contagios" que está experimentando el país, "no habrá más olas, sino que simplemente no pararán".
En esta línea, García-Page asegura que el escenario de medidas actual "se está quedando estrecho", e insta al Gobierno a actuar con la mayor celeridad posible: "Por muchas decisiones que tomemos en las autonomías, incluso restrictivas, estas son limitadas. No podemos tocar derechos fundamentales salvo que lo decida el Estado", expresa.
Las peticiones de las autonomías ante el aumento de contagios
Durante la tarde de este lunes, el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, sentenciaba que España está viviendo su "punto álgido" de la tercera ola. La incidencia acumulada ya asciende a los 689 casos por cada 100.000 habitantes, mientras los datos de este fin de semana han sido los más preocupantes desde el inicio de la pandemia.
En esta línea, la petición de endurecer las medidas no solo parte de la región manchega. Castilla y León, que está sumida en una lucha judicial con el Gobierno por adelantar el toque de queda a las 20:00 horas, también ha insistido en la gravedad de la situación.
La consejera de Sanidad de la Junta, Verónica Casado, dice que no es deslealtad: "Pedimos unidad de acción. Queremos medidas de forma consensuada. Todo el mundo sabe que siempre hemos sido leales a la toma de decisiones uniforme, pero necesitamos medidas sanitarias para contener esa evolución".
A esta se le suma Andalucía, donde su presidente, Juanma Moreno, ha apelado directamente al Ejecutivo: "Lo que le pido al Gobierno es que tenga un plan, que no se improvise", esgrimía en una rueda de prensa previa a su solicitud de ganar competencias.
Pide al Gobierno el confinamiento domiciliario a los municipios de más de 1.000 casos por cada 100.000 habitantes y permitir adelantar el toque de queda: "El Gobierno central está jugando con fuego. Aquí no puede haber más que una máxima que es salvar vidas".
Este martes, ha expresado su preocupación al asegurar que la "fuerza de la tercera ola hace que la curva crezca en vertical. Nos preparamos para ello", y ha anunciado que aprueba el Plan 4.500, que habilita hasta más de 15.200 camas convencionales y 2.600 en UCI .
Este pensamiento también lo comparte Alberto Núñez Feijóo, presidente de Galicia, que ha señalado directamente al Gobierno en caso de no tomar nuevas medidas: "Es su responsabilidad. Deberíamos tener la posibilidad de habilitar un toque de queda, como mínimo, desde las 20:00 o las 21:00 horas", incide.
E incluso propone que estas restricciones de movilidad sean aún más severas: "En casos excepcionales, si lo piden los datos, deberíamos tener la posibilidad de instaurar el toque de queda a las 18:00 horas", concluye.
Un sentir que coincide con el de los dirigentes del País Vasco. En este caso, el lehendakari Íñigo Urkullu asegura que hay alternativas al confinamiento domiciliario, pero que se necesita una mayor decisión por parte de Sanidad: "El consejo interterritorial debe proponer medidas básicas de limitación de actividad y de movilidad", apuntaba el pasado sábado en otra rueda de prensa.
Hasta el momento, Salvador Illa mantiene su posición y aboga por "esperar" a que los datos se calmen: "Pensamos que nos quedan unos días, quizá alguna semana todavía dura de incremento de casos, pero pensamos que con la medidas que se están tomando, aplicándolas bien, vamos a derrotar y doblegar esta tercera ola", sentencia en su entrevista en Al Rojo Vivo.