El Gobierno condena el apaleamiento en Ferraz de un muñeco de Sánchez en Nochevieja: "Basta de odio"

"Vergonya i indignació! (Vergüenza e indignación)" ha criticado Joan Baldoví, líder de Compromís en la red social X. Es una de las primeras reacciones políticas después de que esta Nochevieja varios manifestantes hayan apaleado un muñeco del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Según el periodista Israel Merino, allí presente, un grupo de manifestantes ha ahorcado y apaleado al muñeco al grito de "hay que hacer esto al de verdad". También señala que en otro momento han intentado quemar el muñeco, sin conseguirlo, y han proferido gritos de "psicópata, psicópata".

Desde el Gobierno, Óscar López, director del Gabinete de Presidencia, ha expresado su repulsa. "Esta es la verdadera amenaza para nuestra democracia y las de todo occidente. Los ultras y sus mensajes de odio, amparados por la derecha y difundidos por medios ultras que son financiados con dinero público. Esto es lo que no queremos para 2024", ha sentenciado en un mensaje en X.

En su cuenta de X (Twitter), el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha criticado estas imágenes, pidiendo una España "más justa, libre, diversa, habitable y tolerante" para el año 2024.

"Ya no solo asedian nuestra sede, ahora también simulan el apaleamiento del presidente del Gobierno de España. Basta de odio. Basta de energúmenos", afirma.

También el ministro de Transportes, Óscar Puente, ha condenado estos hechos. "La verdad es que han dejado de hacer gracia hace bastante tiempo. Las actitudes complacientes de algunos líderes del PP y de sus terminales mediáticas les han dado alas. Esto no se puede consentir ya", ha escrito.

El PSOE cree que puede ser delito de odio y estudia vía legales

Al respecto, el PSOE ha indicado que "está estudiando todas las vías legales, que afectan tanto a los que participantes como a los organizadores y a los presentadores en el canal oficial del evento que se convocó anoche en la calle Ferraz. Creemos que lo ocurrido puede estar incluido dentro de un delito de odio", han señalado.

"En todo caso, los hechos, los comentarios vertidos en la retransmisión y todo en su conjunto es la realidad de lo que hemos venido avisando desde hace mucho tiempo", consideran, y acusan directamente a Vox de estar sembrando el doio: "Sabemos que Vox y sus organizaciones satélites no sólo no condenan, avalan este tipo de actos, pero nos gustaría saber qué opina él Partido Popular, el Sr. Feijóo o la Sra. Ayuso (...). Cuando no se condena, se es cómplice", advierten.

También la exdirigente de Vox, Macarena Olona, se ha manifestado sobre estos hechos. "Sería cómico si no fuera algo tan serio. Que en otros casos ha acabado en condena penal. Montan un cotillón el día de Nochevieja frente a la sede de un partido. Después de meses de estar allí ondeando banderas agujereadas, cargando contra el Rey y la Policía y viendo que lo único que están consiguiendo es reforzar al adversario por lo ridículo y estrambótico de las protestas", comienza un amplio mensaje en X.

300 personas según la Policía

Múltiples vídeos del momento publicados por diferentes usuarios en redes sociales, revelan que el muñeco ha terminado la noche en el suelo, destrozado, tras recibir latigados, puñetazos y patadas, todo en un ambiente festivo con banderas de España y una pancarta que en la que se leía "Pedro Sánchez a prisión".

Unas 300 personas, según Delegación del Gobierno, secundaron esta noche la convocatoria para tomar las uvas cerca de la sede nacional del PSOE en la calle Ferraz de Madrid en protesta por la amnistía. Pese a la publicidad del acto difundido en redes por Revuelta (organización juvenil de la órbita de Vox) desde hace unos días, la convocatoria no lograba la repercusión esperada por los organizadores.

La cifra de participantes está en línea con el seguimiento que en las últimas semanas ha tenido esta concentración convocada todas las noches ante la sede socialista desde hace dos meses en contra de la amnistía.

Algunos de los manifestantes también mostraban su indignación después de que la Policía Municipal de Madrid impidiera a los organizadores que pudieran "meter sus camiones" en Ferraz para el montaje que querían organizar para celebrar las campanadas, según han denunciado los convocantes en la red social X.