El despilfarro en la Feria de Valencia genera una deuda de 1.000 millones

Pantallas de plasma, cheques regalo de 600 euros, cajas de puros habanos, cámaras digitales. Son regalos que se hacían los miembros de la cúpula de Feria de Valencia de forma opaca. Entre ellos, la alcaldesa de Valencia Rita Barberá, que recibió 7 mil euros en regalos. Su explicación: que todo el mundo los recibe sobre todo en Navidad.   

Cadenas de música y plasmas de última generación, bolsos, zapatos y prendas de las tiendas más lujosas, cheques regalo de El Corte Inglés de hasta 600 euros o cajas de puros Montecristo. Son algunos de los regalos que, según 'El Mundo', hacía la feria de Valencia a su casi 70 patronos. 

"Es verdad que en determinadas fechas se han recibido obsequios, habría que preguntar a los políticos de España por los regalos recibidos", ha declarado Barberá. Precisamente ella fue la más beneficiada. Recibió, al menos, 7.600 euros en regalos y le parece tan normal.

El fondo del asunto es el descontrol del gasto en Feria de Valencia que denunció la Intervención de la Generalitat. Los patronos, en representación del Ayuntamiento y de la Generalitat han dado su visto bueno al rescate de la Feria. 

Se trata de hacer frente a la gigantesca deuda derivada de una ampliación que se presupuestó en 300 millones de euros, pero que ha acabado costando más de 1.000 que pagarán los ciudadanos. La Fiscalía investiga los escandalosos sobrecostes de esas obras y también viajes a El Salvador, Suiza , China o Brasil. Todo cargado de forma opaca a las cuentas de la Feria como gastos de representación.