UNO DE LOS FALLECIDOS ACABABA DE SER PADRE
El dolor de la minería
La mina ha destrozado muchas familias este lunes. El mazazo ha sido tan grande que va a ser muy difícil de superar para los seres queridos de los seis fallecidos en la mina La Pola de Gordón.
Los trabajadores tenían toda la vida por delante. Centenares de personas se han acercado a la mina para estar ofrecer apoyo a sus familiares y despedirse de sus compañeros y vecinos.
Desempeñaban diferentes actividades en la mina, según afirma el portavoz del comité de empresa, José Antonio Colinas: "Trabajando en la rampa había un poco de todo: mineros, picadores y también un vigilante de la explotación que ha fallecido". A pesar de su juventud, algunos llevaban muchos años trabajando en la mina. Uno de ellos, incluso, acababa de volver de un permiso de paternidad.
Todos los vecinos están conmocionados en la zona ante la mayor tragedia minera de los últimos 18 años.