Eduardo Zaplana, una vida política marcada por la corrupción que culmina con diez años de cárcel

El expresident de la Generalitat Valenciana Eduardo Zaplana era uno de los hombres fuertes dentro del Gobierno del popular José María Aznar. De hecho, fue su portavoz en el ejecutivo de 2002 en el que de los 14 miembros, una docena han estado investigados o han sido condenados en escándalos corrupción. El propio Zaplana, este martes condenado a diez años de prisión, ya había estado bajo la lupa de la justicia desde hace tiempo.

Desde que en 1995 se convirtiera en president de la Generalitat Valenciana, la sombra de la corrupción ha planeado sobre él. Durante una conversación grabada con el exconcejal del PP dentro del 'caso Naseiro', Salvador Palop, afirmaba que se tenía que "hacer rico porque" decía estar "arruinado". Un caso, por el que nunca llegó a ser imputado, y que fue cerrado. Eso sí, en 2023 en una entrevista en Salvados descartaba recordarlo, pero sí admitía que necesitaba dinero para vivir.

Tras ello y cuando le preguntaban por corrupción en la Generalitat, hablaba de que "esos hábitos afortunadamente han desaparecido y ya no se repiten en la España de hoy". Es en 2002 cuando entra como ministro de Trabajo de Aznar. Años después la UCO intentó, sin éxito, que fuese imputado en la 'operación Púnica' por un delito de tráfico de influencias.

En otros audios se puede escuchar una conversación entre Zaplana y el expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, en la que habla de "poner" jueces. "Para que habléis los dos que sois amigos de [Rafael] Catalá. Para poner... bueno, poner... él ya se lo gana por escalafón y por puntos. Se va a Zaragoza de fiscal Jefe de la Audiencia Nacional", dice el valenciano a lo que González le pregunta si es su "amigo". Él responde que "va jodido, está el segundo, de teniente fiscal".

En definitiva, una carrera política que finaliza abruptamente en el mes de abril del año 2008, cuando anunció su renuncia "al acta de diputado". Tras fichar como directivo de Telefónica ha vuelto solo a la vida pública a causa de sus citaciones judiciales. Algunas muy accidentales como la ocurrida este año y que provocó el enfado de una mujer cuando esperaba a entrar en los tribunales: "Haz la cola". Ahora parece que su carrera culmina con esta última condena.