OBTIENE MÁS VOTOS PERO MENOS ESCAÑOS QUE EN 2016
La derecha fragmentada hunde al PP y castiga los resultados de la suma con Ciudadanos y Vox
Pese a que la derecha sacó en estas elecciones más votos que en 2016, su división y la movilización de la izquierda han provocado que pierda 20 escaños con respecto a las últimas generales.
En estas elecciones, la suma de los votos de la derecha en realidad no ha sido muy distinta a la de las generales de 2016. De hecho, en comparación con el 26J, la derecha ha obtenido este domingo 200.185 sufragios más que en aquellos comicios.
Sin embargo, la movilización de la izquierda hace que se traduzcan en una caída de tres puntos respecto al total, mientras que la fragmentación de sus votos resta eficacia y provoca un desplome de 20 escaños en el bloque de derechas.
"Esa prima conservadora que siempre había tenido el sistema electoral se ha ido al PSOE, que ha sido el más votado en la mayoría de circunscripciones", explica el politólogo Pablo Simón.
"La ley electoral española castiga muchísimo la fragmentación y la división", apunta por su parte Narciso Michavila, presidente de la consultora GAD3.
Al PP le ha faltado tiempo para acusar a Vox y a Ciudadanos de esta división y del hundimiento de su partido, que ha obtenido su peor resultado histórico. Asimismo, ha invitado a ambas formaciones a reflexionar sobre "si ha merecido la pena", en palabras de su líder, Pablo Casado.
Casado ha mostrado sus cartas de cara a los comicios del 26 de mayo, proponiendo una estrategia común de las tres derechas "en la que nuestro votante de centroderecha se dé cuenta de que la fragmentación solo ha favorecido un Gobierno de Pedro Sánchez".
Sin embargo, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha situado a su partido como el grupo que sustituirá a los populares al frente de la oposición a Sánchez y Vox ha redoblado sus ataques hacia lo que Santiago Abascal llama "la derechita cobarde". "La única responsabilidad la tienen quienes tuvieron 186 escaños y no fueron capaces de oponerse a la izquierda", se ha defendido.
Los expertos auguran más división a partir de ahora. Pablo Simón indica que el hecho de que Vox, PP y Cs vayan a estar en la oposición dará "más margen de maniobra para continuar comiéndole espacio electoral al sector más duro del PP".
Lo cierto es que las elecciones autonómicas y municipales son mucho más proporcionales que las generales y eso puede beneficiar a las derechas.