Una carta conjunta
España da un mes a Borrell para responder a su petición de suspender el acuerdo de asociación con Israel
Irlanda y España pidieron que evalúen la posibilidad de suspender el acuerdo en caso de que Israel esté violando los derechos humanos en Gaza. El ministro de Exteriores espera que el 18 de marzo "tengan unas conclusiones al respecto".
El ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, ha pedido este lunes al jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, que culmine en un mes la evaluación que le han pedido España e Irlanda sobre si Israel está cumpliendo con el respeto a los derechos humanos previsto en el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea.
"Espero que en el próximo Consejo de Asuntos Exteriores (previsto para el 18 de marzo) tengamos ya una evaluación, un informe y unas conclusiones al respecto", ha dicho Albares en declaraciones a la prensa, a la reunión que celebraron este lunes los ministros de Exteriores de la UE.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, pidieron la semana pasada a la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y al propio Borrell, que evalúen la posibilidad de suspender el acuerdo en caso de que Israel esté violando los derechos humanos en Gaza.
Una decisión que requiere unanimidad
La decisión de suspender por completo el Acuerdo de Asociación con Israel corresponde al Consejo de la UE, la institución que representa a los países, a propuesta del alto representante de la UE para Asuntos Exteriores o de la propia Comisión Europea, y requiere unanimidad.
No obstante, Albares ha evitado este lunes pronunciarse sobre si España quiere forzar una votación entre sus socios. "Los que nosotros esperamos es que todo pueda resolverse a través del diálogo", ha dicho el ministro, que ha insistido en la necesidad de un alto el fuego permanente en la Franja.
Y en este sentido, ha mostrado la "completa oposición" de España a que Israel lleve a cabo el plan que está preparando para una invasión terrestre en la ciudad de Rafah, porque sería una "catástrofe". En la misma línea, el ministro de Exteriores irlandés, Micheál Martin, dijo que "desde el punto de vista humanitario, un ataque en Rafah sería absolutamente catastrófico".