EL PRESIDENTE SIGUE ACUSANDO AL DIARIO DE "MANIPULACIÓN"
Esperanza Aguirre pone la mano en el fuego por González en su duelo con Pedro J. Ramírez
Continúa el duelo entre Ignacio González y el diario 'El Mundo'. El periódico publica documentos que demuestran que el presidente madrileño tuvo competencias en urbanismo, a pesar de haberlo negado tajantemente. González insiste en que todo es una manipulación, mientras Esperanza Aguirre ha puesto la mano en el fuego por él.
Uno por uno, el diario 'El Mundo' responde a todos los duelos a los que ayer le retó Ignacio González.
Por ejemplo, sus competencias en urbanismo que él negó, pero que, según un documento, permiteron con su firma desbloquear las parcelas de Majadahonda que fueron origen de caso Gürtel. Competencia a la que hoy González, para defenderse, le pone un pero: "Sólo a efectos de control financiero de un ayuntamiento, jamás de competencias urbanísticas".
Otro desafío de Ignacio González a Pedro Jota. Este, a cuenta de su ático en Marbella: "¿Cómo acredita usted que la sociedad americana es dueña de la sociedad panameña?" . Y 'El Mundo' lo acredita con un documento mercantil que probaría que la sociedad que compró el ático pertenece a otra cuyos testaferros son los que Francisco Correa utilizó para cobrar uno de sus mayores pelotazos, el de Arganda.
Una prueba que tampoco le para los pies al presidente madrileño, que ha redoblado sus ataques a 'El Mundo': "Lleva 17 portadas y siete editoriales en dos años sin presentar ni un sólo documento acreditativo de ninguna de las informaciones".
Para Esperanza Aguirre, la "nerviosa" reacción de su sucesor es normal: "Es normal que trasluzca enfado ante ello". Porque nadie como González, dice Aguirre, ha ofrecido explicaciones: "Un político honrado que ha dado las explicaciones más exhaustivas".
Hoy desde luego no ha sido el día de las explicaciones exahustivas: "Si no se atiene a las reglas de la rueda de prensa, no le vamos a dar la palabra". En esta comparecencia pública no ha admitido ni una sola pregunta de los periodistas.