En plena campaña electoral gallega

Feijóo se desmiente a sí mismo: de considerar los indultos a bromear con ofrecer Defensa a Otegi

El líder del PP niega haber negociado con ERC para investir a Feijóo a pesar de que Génova ya lo contó. Desde el partido reconocen que sí existió una aproximación con su secretaria general, Marta Rovira, pero con "varios matices".

En breve

Cada día que pasa, Alberto Núñez Feijóo ofrece una versión distinta sobre la posición del PP respecto a un posible indulto a los políticos del 'procés'. A última hora del sábado, se trasladó a 16 medios de comunicación distintos, entre ellos laSexta, que estos indultos se podían dar con condiciones. Feijóo compartió esa misma idea el sábado y el domingo, pero el lunes y el martes se ha desmentido a sí mismo.

"Han llegado a decir que ahora estoy de acuerdo con las amnistías y con los indultos. Yo no acepto los indultos ni los aceptaré", decía el lunes el líder del PP. Un día antes, el domingo, aseguraba que no se daban "ni una sola de las condiciones para ningún posible indulto". Es decir, con condiciones sí podrían darse indultos.

Su enésimo giro de discurso se ha dado este martes, cuando el presidente del Partido Popular ha acusado al resto de partidos de verter "calumnias" e "insidias" contra él en los últimos días, tirando de ironía. Feijóo ha dicho que no le sorprendería si "mañana" el PSOE y los independentistas dijeran que él ofreció el Ministerio del Interior a ERC y el de Defensa al líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, para lograr el apoyo de ambas formaciones a su investidura.

En una comida-mitin en Oroso (A Coruña), el jefe de la oposición respondió de este modo a la secretaria general de ERC, Marta Rovira, quien ha asegurado esta mañana que el PP buscó a su partido para tratar de llegar a un pacto de cara a la investidura. Desde Génova, en cambio, han negado la mayor y han asegurado que "nunca" han entablado "conversaciones o negociaciones con ERC en el marco de la investidura".

En cambio, los populares sí han reconocido que existió la aproximación de la que habla Rovira, aunque con varios matices. En primer lugar, han señalado que su diputado Carlos Floriano se limitó a comentar "de manera informal y coloquial" a la parlamentaria de ERC Teresa Jordà "que deberían dejar gobernar a la lista más votada". Y han añadido que, "por supuesto, Carlos Floriano no recibió encomienda alguna para plantear nada".

Unas horas después, Feijóo ha hecho sus primeras declaraciones al respecto y ha rechazado las palabras de Rovira, las cuales ha relacionado con las elecciones gallegas de este domingo. "Se juegan un cambio de Gobierno y lo saben. Por eso, no descartéis que mañana digan que he ofrecido el Ministerio del Interior a Esquerra Republicana y el Ministerio de Defensa al señor Otegi. No penséis que esto no es posible. Llevamos una tras otra, una insidia, una calumnia", declaró con sorna.

"Votar al PSOE es lo mismo que votar al BNG"

Tras negar las palabras de Rovira, Feijóo se ha querido centrar en la convocatoria electoral de este domingo. El líder del PP ha señalado que "Galicia se juega continuar con un modelo que ha sido ejemplo de estabilidad y buen gobierno" o "acabar con él y emprender un camino hacia ninguna parte".

En este sentido, ha advertido de que "votar al Partido Socialista actual es exactamente igual que votar al Bloque Nacionalista Gallego" y permitir que Galicia se incorpore al "club de comunidades autónomas soberanistas con partidos independentistas" al frente. "Los gallegos nunca hemos sido un lugar para desestabilizar a su país. Hemos sido siempre una comunidad autónoma con su cultura, sus lenguas y un enorme carácter, pero nunca rompiendo la convivencia con el resto de españoles […] Galicia tiene mucho de qué presumir en España", defendió.

"No tenemos nada que envidiar a nadie. Aquellos que quieran copiar lo que se hace fuera de Galicia, que voten al PSOE o al BNG. Nosotros estamos orgullos de ser gallegos y de hacer las cosas como venimos haciéndolas", ha continuado el presidente del PP. Con todo ello, ha presumido de que su formación ha "construido un modelo de nacionalidad histórica y de convivencia" con "concordia, libertad y estabilidad" del que los gallegos se pueden sentir "orgullosos". "Una Galicia amplia, moderna, acogedora y sensible" que no pueden "dejar que destruyan".

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