Tensión en la sesión de control
Sánchez acusa a Casado de "desleal" tras reprochar al Gobierno "el caos" en la crisis con Marruecos
El presidente del Ejecutivo ha criticado que el líder del PP "por la mañana" le dé su apoyo y "por la tarde diga lo contrario". Casado, en cambio, incide en la situación diplomática: "Es la crónica de una crisis anunciada".
Este miércoles se ha celebrado una nueva sesión de control al Gobierno que, a diferencia de lo que marcaba la agenda, se ha visto completamente protagonizada por la situación en Ceuta.
"La actualidad manda", según las palabras del líder del Partido Popular, Pablo Casado, que ha arremetido contra el Ejecutivo de Sánchez por la gestión con Marruecos: "Es la crónica de una crisis anunciada. Llevamos advirtiendo de errores desde hace años", ha expresado el representante.
En este sentido, Casado cataloga como dichos errores la ruptura "de la tradición de viajar a Marruecos" y la falta de reacción "al reconocimiento de Trump" sobre la supuesta soberanía de nuestros vecinos en suelo saharaui. "El caos de su Gobierno es la mayor debilidad fuera", ha espetado.
Tras esta interpelación, la respuesta del líder del Ejecutivo ha sido contundente, y alude directamente a la conversación telefónica que tuvieron ambos representantes ayer: "No me ha quedado claro, ¿usted apoya al Gobierno español o no lo apoya? Usted por la mañana dice que me apoya y por la tarde dice justo lo contrario", asevera.
Y Sánchez ha ido más allá, recalcando que la oposición ejercida por el PP, en este tipo de cuestiones, destaca por su corte "desleal", y lanza: "Es lo que pasa siempre con ustedes, utilizan cualquier calamidad, también una crisis con Marruecos inédita, para tratar de derribar al Gobierno".
"El problema es que tenemos una oposición que es desleal con los intereses de Estado y la ciudadanía. España sufre un desafío y queremos saber de qué lado están: ¿del lado del interés general o del de los fines partidistas?", ha concluido en respuesta a Casado.
En Génova lamentan el tono de la disputa
Una vez concluido el rifirrafe, fuentes del Partido Popular han indicado a laSexta, como indica la periodista María Llapart, que el tono o las palabras en la sesión "quizá no ha sido el adecuado". En este sentido, sostienen que, a pesar de la disputa parlamentaria, el PP sí apoya al Gobierno en su labor para controlar la crisis con Marruecos, pero afirman también que dicho apoyo "no puede ser incondicional".
En este sentido, reconocen que Casado, en su intervención, "podría haber sido más cordial", pero a su vez critican las respuestas de Sánchez, cuyo tono definen como "desproporcional". Aun así, lamentan que se haya interpretado que su formación no es un partido de Estado, y remarcan que, durante la intervención, la intención del líder popular no era más que incidir en los errores que han llevado a esta situación diplomática.
Arrimadas recalca los "errores" cometidos en la gestión de la crisis
También la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha reservado su pregunta a Sánchez en referencia a lo que está pasando en Ceuta. Así, la dirigente naranja asegura que "sin duda, esto es mucho más que una crisis humanitaria y migratoria".
Arrimadas define la situación como "un desafío sin precedentes": "Toda España ha visto cómo Marruecos ha abierto literalmente la frontera" y, en un tono cordial, afirma que "el culpable es Marruecos". Ahora bien, también ha arremetido contra el Ejecutivo por su política exterior: "¿Sabe por qué no me ha respondido? Porque han cometido muchos errores, su Gobierno ha generado un vacío democrático con partidos muy importantes".
Ante esto, Sánchez ha venerado la labor del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y asegura que ya son "en torno a las 4.800 personas que ya se han devuelto a Marruecos". Aun así, Arrimadas ha pedido una respuesta "contundente" ante la crisis: "Nosotros, a diferencia de sus socios, somos un partido de Estado. Pero para conseguir esa unidad ustedes deben corregir errores evidentes. Hay que dejar muy claro que a España no se la chantajea", ha concluido.
"Un asalto a nuestras fronteras en toda regla"
Fuentes de la Vicepresidencia del Gobierno creen que lo que se está viviendo en la frontera con Marruecos "no es una crisis migratoria". Es más, ponen el foco directamente en la actuación del Estado Marroquí: "Es un asalto a nuestras fronteras, en toda regla".
Aun así, desde el Gobierno creen que "todo está volviendo a la normalidad", en referencia al retorno de migrantes y al despliegue de las fuerzas de seguridad. E insisten en trabajar ahora por mejorar las relaciones diplomáticas con el país vecino: "Hay que recuperar las relaciones con Marruecos. Es un vecino importante y debe seguir siendo amigo de España".